- Salud
Saber diferenciar entre lo que los simples y complejos nos aportan es clave.
Cuando de hacer dieta se trata, la gente tiende a extremar, dice el Dr. Donald Hensrud, director del Programa de Vida Sana de Mayo Clinic. Esa es la verdad cuando de carbohidratos se trata. Los carbohidratos son fundamentales para la buena salud general y no hay nada complicado en comerlos, siempre y cuando sean integrales y complejos. “Entre los alimentos, hay muchos carbohidratos, pero varios de ellos no son muy sanos”, afirma el Dr. Hensrud.
El pan blanco, por ejemplo, es una alternativa menos sana que el pan integral debido a su procesamiento. “Se retira la fibra (o el salvado) y el germen del trigo, componentes que contienen la mayoría de los nutrientes. Se añaden algunos nutrientes, como tiamina y riboflavina, pero no en la cantidad correcta que tienen los alimentos integrales”, dice el médico.
En muchas comidas procesadas se añade azúcar. “El consumo de azúcar ha aumentado enormemente en este país y el azúcar añadido es un gran problema de salud”, añade.
El Dr. Donald Hensrud señala que hay que reemplazar los dulces azucarados con fruta fresca y, en lugar de la harina blanca procesada, probar con granos integrales. “Los alimentos integrales, o sea, el arroz integral, la avena o la quinua y otros cereales antiguos como el fideo y el pan de trigo integral, son alimentos estupendos y cuando se los consume con moderación, mejoran la salud”, concluye.