Las mujeres somos seres complejos, eso no es ninguna noticia. Dentro de esa complejidad entra un sube y baja de emociones, hormonas, antojos y deseos, que son algo díficil de comprender... y más si eres hombre. Pero para que nadie se siente mal, lo primero es reconocer que hay veces en que ni nosotras mismas nos entendemos.
Las fluctuaciones en el deseo sexual entran dentro de esta montaña rusa de la cual hablamos... pero hay una explicación muy válida que nos hará comprender de manera responsable porque hay veces que no queremos nada, y otras donde queremos TODO.