Mié, 03/03/2021 - 11:37
- Salud
En el marco del Día Mundial de la Audición (3 de marzo), la Fundación Oír es vivir te invita a apreciar más tu audición y cuidarla. Descubre algunos ejemplos de ruidos que pueden afectar tu audición.
¿Sabías que el ruido puede hacerte daño? El ruido es un problema de salud pública que no solo afecta tu bienestar físico sino también mental. Cada día son más y más los países alrededor del mundo que adoptan acciones para prevenir que las personas afecten su audición a causa de ruidos nocivos ya que el daño que puede provocar en el oído puede ser irreversible.
Estudios han demostrado que la exposición continua a ruidos por encima de los 85 decibeles, puede causar daño irreparable a la audición, ocasionando pérdida de audición temporal, acuéfanos (sensación de zumbido) y pérdida permanente e irreversible, según expertos de la Fundación Oír en Vivir.Además, la exposición a sonidos fuertes puede afectar otros aspectos del ser humano incluyendo estrés, ansiedad, depresión, jaquecas y trastornos psicofísicos en general; cansancio crónico e insomnio; enfermedades cardiovasculares, así como cambios conductuales, comportamientos antisociales, agresividad e intolerancia.
Además de la exposición al ruido, otras causas de pérdida auditiva pueden ser: causas genéticas, complicaciones en el parto, enfermedades infecciosas, infecciones crónicas del oído, trauma, medicamentos ototóxicos o simplemente envejecimiento.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que en el mundo hay 466 millones de personas con pérdida auditiva discapacitante lo que quiere decir una pérdida de audición superior a 40dB en el oído con mejor audición en los adultos, y superior a 30dB en el oído con mejor audición en los niños. De ese total se estima que 34 millones son niños y en el 60% de los casos de pérdida de audición en niños las causas son prevenibles. Los restantes 432 millones son adultos.
En el marco del Día Mundial de la Audición (3 de marzo), la Fundación Oír es vivir te invita a apreciar más tu audición y cuidarla. "Es hora de tomar conciencia del daño inminente que el ruido presenta a la salud auditiva y a la salud en general para personas de todas las edades".
¿Pero cuánto sonido es 85 decibeles?
La Fundación te cita algunos ejemplos que te darán una idea:
- Pájaros trinando: 10 db
- Rumor de hojas de árboles: 20 db
- Murmullo oleaje suave en la costa: 30 db
- Zonas residenciales: 40 db
- Conversación normal: 50 db o 60 db
- Aspiradora: 65 db
- Conversación acalorada: 80 db
- Tráfico en la ciudad: 80, 85 db
- Sierra eléctrica, cascos de música (riesgo de lesión si la exposición se prolonga 2 horas): 95 db
- Discoteca, petardos pirotecnia: 110 db
- Concierto de rock, taladro: 120 db
- Sirena de tren, alarma de incendio: 125 db
- Martillo neumático: 130 db
- Avión despegando: 140 db
Se calcula que, en 2050, más de 900 millones de personas —es decir, una de cada 10— sufrirá una pérdida de audición discapacitante. La situación de las personas que padecen pérdida de audición mejora gracias a la detección temprana, a la utilización de audífonos, implantes cocleares y otros dispositivos de ayuda, así como con el empleo de subtítulos, la terapia auditivo verbal para enseñarles a hablar, el aprendizaje del lenguaje de señas y otras medidas de apoyo educativo y social.
La Fundación presenta algunas recomendaciones para una “Dieta de silencio” para ser tomada en cuenta en el día a día:
- Utilizar protección auditiva cuando te encuentres en eventos o sitios ruidosos.
- Prestar atención a los sonidos que emites y respete la paz y tranquilidad de los demás a tu alrededor.
- Bajar un poco el volumen al que acostumbras escuchar música con audífonos.
- Bajar uno o dos puntos el volumen al que habitualmente escuchas la televisión, radio o equipos de sonido. Evitar pitar cuando estás conduciendo.
- En restaurantes, discotecas, teatros y otros sitios de entretenimiento, solicita a los encargados bajar el volumen cuando lo considere necesario.
- Reemplaza actividades donde hay altos niveles de sonido por otras con menos ruido.
- Hacerse periódicamente un examen de audición.
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