Mar, 03/17/2020 - 11:23
- Mente y Cuerpo
En psicología nuestra proyección está limitada por nuestra percepción, que nos limita la forma de ver el mundo. Si te gusta un animal, puede mostrar fortalezas que ves en ti; y si otro te desagrada, se trata de tu lado oscuro.
Dime qué animal te gusta y te diré quién eres... Si te gusta un animal en específico y le ves ciertas habilidades y virtudes, puede tratarse de algo que tu subconciente está reflejando de ti.
"Todo en el cerebro es proyección. En psicología nuestra proyección está limitada por nuestra percepción, que nos limita la forma de ver el mundo. Si tú eres un tipo de animal con ciertas características y no te gustaría ser otro por ciertas peculiaridades, lo que nos está indicando el cerebro es cuáles son las fortalezas que tenemos reconocidas y cuáles son aquellas que no nos agradan de nosotros mismos y que tenemos", señaló la especialista en Neurociencia, Ani Rodríguez durante el primer programa de Mujer.
¿Y qué hacer con esta información? Según la especialista, al hacer este autoanálisis:
1. Aceptas cuáles son tus fortalezas y tus puntos a mejorar.
2. Puedes hacer un plan de acción para que cuando observes esa debilidad, utilices las fortalezas para mejorarlo. Cuando tienes la fortaleza de auto observarte, puedes mejorar tu lado oscuro.
Una forma divertida de abordar la proyección
Así, durante el programa transmitido por Nex Canal 21 y Mujer.com.pa, la especialista trató el tema de la proyección desde un punto de vista divertido.
Sara, por ejemplo, dijo que quería ser un delfín porque es amigable, tierno y tiene la piel delicada. La ex reina no sería una cucaracha "porque es cochina, da miedo, quiere ensuciar a todos".
"Lo importante es la concepción que tenemos respecto al delfín, esto me lleva a la percepción. Probablemente esas características no son del animal sino de ella y de su proyección",mencionó al respecto la especialista.
Carolina no sería ni culebra ni ratón, le parecen malos, no le gustan los animales que se arrastran. "La culebra traicionera y con la rata te contagias". En cambio, quisiera ser un tigre porque es fuerte y protege a su familia.
"Carolina es fuerte, pero sabe que esa fortaleza puede ser destructiva con palabras o acciones", señaló Rodríguez.
Mientras que el animal que quiere ser Pablo es el águila "porque me encantaría poder volar. Es imponente". A él no le gustan las culebras.
"El animal que no quieres ser, a nivel psicológico te muestra tu lado oscuro, lo que no quieres ver en ti. Pero con tus habilidades, puedes convertir las debilidades en fortaleza, especialmente en esta época de crisis que la sociedad nos está obligando a cambiar los paradigmas", destacó Rodríguez.
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