Cómo renovar las verjas de hierro cuando están oxidadas

La fachada de nuestra casa denota lo cuidadosos que somos con ella. Y las rejas, o bien conocidas verjas, son esa parte importante que no debemos dejar deteriorar.

Las inclemencias del tiempo en Panamá son causantes de que estos elementos constructivos de hierro se deterioren rápidamente. El viento, el polvo, el sol, la lluvia y la humedad hacen que la pintura protectora se debilite ocasionando óxido, una bacteria que corroe el hierro y se extienda por todo el elemento, dañándolo.

No es necesario que al notar los desgaste en el hierro forjado debas cambiar la verja, ya que las mismas son muy costosas. En esta entrega te damos unos pasos sencillos para devolverles sus años mozos a tus rejas de hierro. Un simple mantenimiento que ayuda a que seas un propietario responsable con tu casa.

Lo primero es comenzar a limpiar las superficies de polvo o grasa que se hayan acumulado por el tiempo. Es importante hacer este ejercicio cada año o año y medio, y dependerá de la zona donde vivas ya que en Panamá hay lugares más húmedos que otros. Revisa el daño en tus rejas de hierro, verifica si cuentas en casa con los elementos necesarios para trabajar y ¡manos a la obra!

Materiales

• Lijas de tela #100 a 280, estas son ideales para trabajar el metal, limpian muy bien el óxido y remueven la pintura vieja. Por ser de tela evitan el desgarro y despedazo de la lija al movimiento.
• Cepillo de alambre, el cual ayudará a remover pedazos de pintura englobada y las cáscaras de la soldadura que quedaron; además, te permitirá llegar a espacios que la mano no puede.
• Trapo seco para limpiar los residuos de polvo generados al lijar.
• Pintura anticorrosiva o Minio Rojo, esta humectación permite combatir la aparición de óxido en la superficie.
• Pintura para metal o barniz sintético disponible en rojo, blanco, negro, bronce o gris.
• Brocha delgada de pelo.
• Disolvente de anticorrosivo (aguarrás o tiner). Recuerda un diluyente también para suavizar la pintura.

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Procedimiento

1. Lo primero es limpiar las rejas con el trapo de algodón seco, hay que evitar mojarlo.
2. Con la lija y el cepillo vamos a retirar la pintura vieja para liberar el óxido acumulado. Es un proceso que puede tomar varias horas, pero debes ser paciente ya que hay que dejar la zona libre para poder aplicar los productos.
3. Si tus rejas están muy oxidadas puedes tardar hasta días en terminar, lo importante es que en esta cuarentena tenemos mucho tiempo para trabajar.
4. Apenas terminas vas limpiando con otro trapo seco los residuos de polvo.
5. Lo primero que aplicamos es el anticorrosivo, mejor conocido como Minio Rojo, hoy día existen pinturas que ya dicen traerlo en su compuesto, pero es mejor usarlo en su presentación original como base para la pintura. Debes aplicarlo en todas las áreas, en especial las que estaban muy contaminadas.
6. Deja secar y luego aplica la pintura para metal de tu preferencia.
7. Por último, el barniz o esmalte transparente ayudará a lograr una tercera capa de protección para retrasar el deterioro por el clima.

Si sientes que la brocha no deja correr la pintura bien, usas el disolvente, la remojas unas horas y luego vuelves a pintar. Y si la pintura está muy espesa, un diluyente puede ayudar a suavizarla.

Estos mismos pasos pueden ser aplicados en nuestros muebles de jardín o estanterías de hierro.

¡Listo! Con estos simples pasos y materiales renovarás la imagen de tu casa. Cada parte de ella merece amor y cuidado, recuerda que es tu refugio seguro.

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