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Es precisamente el área ocular la zona del cuerpo más delicada y como tal requiere unos cuidados especiales.
Sombras de ojos, lápiz, cubre ojeras, rímel… Estos son algunos de los productos de maquillaje usados por muchas personas en su día a día. Productos que tienen la peculiaridad de estar en contacto con una parte del rostro muy concreta, los ojos.
Aunque probablemente no sea algo muy sabido, es precisamente el área ocular la zona del cuerpo más delicada y como tal requiere unos cuidados especiales, sobretodo a la hora de retirar todos estos productos usados para embellecernos.
Recomendaciones para no afectar los ojos:
Limpieza de manos. El primer paso es lavarse las manos antes de empezar. Así se evita que cualquier resto de suciedad o cualquier bacteria que alberguen nuestras manos pueda entrar en contacto con el ojo.
Retirar las lentes de contacto. En el caso de los usuarios de lentillas, antes de 'actuar' sobre cualquier producto hay que retirarlas. De esta manera evitaremos que los restos de maquillaje dañen las lentes de contacto. Y, además, impediremos que las lentillas se muevan y luego sea difícil extraerlas del ojo.
Usar productos adecuados. La oferta de productos para retirar el maquillaje es muy amplia. Toallitas, cremas, lociones o limpiadores líquidos son algunas de las opciones. Y hay que saber elegir.
Lo más importante a la hora de decantarse por una o por otra marca y modelo es que el producto esté concretamente indicado para usarlo en los ojos.
Y además hay que buscar aquellos cuyo pH sea compatible con el de la superficie ocular para evitar enrojecimiento y picores.
Además, se debe tener en cuenta qué tipo de maquillaje se va a retirar. Si se han usado cosméticos resistentes al agua, ‘waterproof’, se recomienda un agua micelar bifásica con aceite, que facilita la eliminación del maquillaje sin dificultad.
Sino, un agua micelar normal puede eliminar el maquillaje sin dificultades.
No frotar los párpados. Por las prisas o por ser más efectivos en la limpieza podemos presionar en exceso los párpados. Los especialistas recomiendan hacerlo despacio y no frotar intensamente el área, porque la piel de esta zona es la más fina del cuerpo.
Vigilar la caducidad de los productos que aplicamos en los ojos. Los productos desmaquillantes, igual que los medicamentos, tienen fecha de caducidad. Esta viene indicada en el envase. Y no se deben usar productos pasados de fecha porque su composición puede haberse alterado y afectar a los ojos.
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