- Salud
Las vacunas ofrecen protección contra enfermedades infecciosas. Infórmate sobre cómo puedes mantenerte al día con las vacunas recomendadas para adultos.
Ya no eres un niño, así que no tienes que preocuparte por las vacunas, ¿verdad? Incorrecto. Te contamos cómo tener tus vacunas al día.
¿Qué factores podrían afectar mis recomendaciones de vacunas?
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) recomiendan vacunas para adultos en función de su edad, vacunas anteriores, salud, estilo de vida, ocupación, destinos de viaje y actividad sexual.
¿Cómo puedo verificar mi estado de vacunación?
Para obtener información sobre tu estado de vacunación, habla con tus padres u otros cuidadores. Consulta con el consultorio de tu médico, así como con los consultorios médicos anteriores, escuelas y empleadores. O comunícate con el departamento de salud de tu estado para ver si tienen un registro que incluya vacunas para adultos.
Si no puedes encontrar tus registros, el médico podría hacerte análisis de sangre para ver si eres inmune a ciertas enfermedades que se pueden prevenir con vacunas. Es posible que necesites vacunarte de nuevo.
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¿Qué vacunas necesitan los adultos?
Habla con tu médico acerca de tus necesidades específicas. Entre las vacunas para adultos que debes considerar, se encuentran las siguientes:
- Vacuna contra la gripe (influenza). Para prevenir la gripe (influenza), los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan la vacunación anual contra la gripe (influenza) para todas las personas a partir de los 6 meses de edad. Los adultos mayores de 50 años de edad no deben recibir la vacuna contra la gripe (influenza) en forma de aerosol nasal. La gripe puede causar complicaciones graves en los adultos mayores.
- Vacuna antineumocócica. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan las vacunas antineumocócicas (hay dos) para adultos mayores de 65 años. Los adultos jóvenes con mayor riesgo de contraer enfermedades neumocócicas también podrían necesitar una dosis de la vacuna. Las enfermedades neumocócicas causan infecciones como neumonía, meningitis e infecciones del torrente sanguíneo.
- Vacuna contra el toxoide tetánico, el toxoide de difteria reducido y la tos ferina acelular (Tdap, por sus siglas en inglés). Una dosis de la vacuna se administra rutinariamente a la edad de 11 o 12 años. Si nunca has recibido la vacuna Tdap, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan que lo hagas lo antes posible. También se recomienda una dosis de la vacuna Tdap durante cada embarazo, preferentemente entre la semana 27 y 36 del embarazo. La vacuna Tdap puede brindarte protección contra el tétanos, la tos ferina y la difteria, que pueden causar problemas respiratorios. Se recomienda un refuerzo de la Td cada 10 años.
- Herpes zóster (culebrilla). Para prevenir el herpes zóster (culebrilla), los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan la vacuna Shingrix para adultos sanos mayores de 50 años. Se administra en dos dosis. Aunque no es mortal, el herpes zóster (culebrilla) puede ser muy doloroso.
- Virus del papiloma humano (VPH). Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan la vacuna contra el virus del papiloma humano para niñas y niños de 11 o 12 años. Los adolescentes y adultos jóvenes que comienzan a recibir la serie de vacunas más tarde, entre los 15 y los 26 años, deben recibir tres dosis de la vacuna. La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) también ha aprobado la vacuna Gardasil 9 contra el virus del papiloma humano para hombres y mujeres de 9 a 45 años de edad. El virus del papiloma humanoes un virus común que puede causar cáncer.
- COVID-19. Si cumples con los requisitos, vacúnate contra la enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19). Una vacuna contra la COVID-19 podría evitar que contraigas COVID-19 o que te enfermes gravemente o mueras a causa de la enfermedad.
Para mantenerte al día con tus vacunas, pídele a tu médico un formulario de registro de vacunas. Lleva el formulario contigo a todas las visitas al médico y pídele a tu médico que firme y feche el formulario por cada vacuna que recibas.