- Bienestar
Algunas personas experimentan esa sensación de tener mucha hambre; aquí las razones por las que tu cuerpo solo piensa en comida...
¿Te ha pasado que después de comer un alimento X te da más hambre, o te ocurre lo mismo estando en un lugar o momento especial? Puede que más de una vez hayas experimentado esa sensación de “abundante hambre” o de ganas de comer en grandes cantidades sin saber la razón. No siempre es solo cuestión de fuerza de voluntad el evitar comer en exceso: existen comidas y situaciones que realmente son adictivas y nos darán mucho más apetito.
Si no quieres comer más de la cuenta y calmar ese apetito incontrolable, aquí te mostramos a qué detalles debes prestarle mayor atención, toma nota:
El aire acondicionado en verano. Durante esta temporada es más fácil perder peso gracias a que la alimentación es más liviana y a que se bebe más líquido. Sin embargo, el estar constantemente expuesta al aire acondicionado provoca que el organismo piense que necesita más energía para mantener la temperatura corporal, razón por la cual sientes más hambre de lo normal.
Algunos medicamentos. Los antidepresivos favorecen el aumento del apetito, si los tomas, asegúrate de preguntar a tu médico sobre los efectos secundarios. También pueden dar hambre algunos suplementos y vitaminas, así que infórmate antes de ingerirlos.
Actividad física nueva. El comenzar una nueva actividad física o hacer ejercicio después de un periodo sedentario, puede hacer que sientas más hambre. La explicación es que tu cuerpo se está ajustando a la actividad y al nuevo gasto energético.
Mantener la luz encendida. Según estudios realizados en ratones que permanecían con una luz baja encendida durante la noche, se pudo observar que estos aumentaron en un 50% su peso luego de ocho semanas. Todo indica que crea la misma relación en las personas que cenan tarde o que duermen con luz en las habitaciones.
La contaminación ambiental. Según un estudio de Critical Reviews in Food Science and Nutrition y el International Journal of Obesity, los productos químicos como los pesticidas y el bisfenol A que contienen los plásticos, entre otras sustancias, alteran el sistema hormonal y endocrino, haciendo que la posibilidad de padecer trastornos alimenticios como la obesidad aumente. Ahora ya puedes comprender por qué te da ese hambre inexplicable. También es bueno que consumas pequeñas porciones de snacks saludables entre comidas para reducir la posibilidad de comer demasiado y a cada rato.