NYFW DÍA 1: Desigual

Otra de las firmas que dio inicio a la Semana de la Moda en Nueva York fue la firma catalana Desigual. 

 

Para esta temporada de verano, la colección está compuesta por piezas reinterpretadas como jerséis convertidos en turbantes y camisas transformadas como faldas, tal como Desigual nació: en 1984, los diseñadores de la marca, Christian y Thomas Meyer, se introdujeron en el mundo de la moda convirtiendo un par de jeans viejos en una ‘chaqueta desigual’. 

 

"Desigual sigue queriendo ser diferente", dice a Efe el director de comunicación global de la marca, Daniel Pérez, quien recuerda la importancia de la actitud de "ver quién es uno mismo" a la vez que "atreverse a llevar la ropa que uno quiere llevar".

 

La colección es atravida. Tiene toques característicos de Barcelona, una ciudad puerto que reúne muchas culturas del Mediterráneo, pero también se aprecia el estilismo de Misha Janette, estadounidense afincada en Tokio, ya que en el desfile hubo varios toques manga, así como una paleta de colores mucho más amplia que en otras oportunidades. 

 

En cuanto a las prendas, los aplausos se los llevan los pantalones palazzo y tobilleros, las faldas de todo tipo (especialmente modelo evasé) y las gabardinas. 

 

Otra de las curiosidades fueron las personalidades que Desigual buscó para sus pasarelas, comenzando por  la modelo que cambió el servicio militar por los desfiles, Shlomit Malka;  la legendaria interiorista de 94 años Iris Apfel, que descubrió la marca a través de su sobrina;  y la actriz Laverne Cox, de "Orange is the New Black" y primera intérprete transexual en ser nominada el Emmy.