- Para Padres
Cómo los padres pueden lidiar con el uso de dispositivos electrónicos con sus niños en casa
Los niños de hoy día nacen con un chip tecnológico, es algo innegable, y como nos ven pegados al celular a nosotros también, lo primero que quieren tener en sus manos son estos dispositivos electrónicos. Lo veo con mi hija de 1 año y lo he visto con las anteriores; puede haber mil juguetes y otros aparatos a su vista, pero corren, escalan, tiran puñete y patadas para alcanzar el bendito teléfono.
Muchas veces cometemos el error de darles muy temprano el acceso a la tecnología por diferentes razones: para que aprendan, para que encajen en la sociedad, para comunicarse con nosotros (cuando están más grandes y comienzan a salir) o simplemente para que se queden tranquilos y que no joroben la vida mientras vemos nuestra serie favorita, disfrutamos de una comida o de un rico baño… ¡Yo también lo he hecho!
Poco a poco me he interesado por investigar acerca de los contras de la tecnología en edad infantil, y ahora con mi hija pequeña he sido más consciente... Porque la de 6 y de 3 son usuarias fieles de YouTube y ya hasta utilizan palabras que aprenden en los videos de huevitos y tutoriales DIY que ven de otros países.
En mi casa tengo algunas reglas para el uso de la tecnología...
1. Tengo que ver lo que están viendo y si es “feo", lo quitan.
2. Se ganan el uso de la tecnología si tienen buen comportamiento.
3. No pueden ver el móvil lejos de un adulto o si por alguna razón están, por ejemplo, en el cuarto, paso a revisar qué están viendo.
4. El tiempo de uso es limitado y no está permitido ver celular/tablet en la mesa, en restaurantes, fiestas, cuando estamos haciendo una visita o compartiendo en familia.
Me falta todavía por corregir y creo que va más por el tema de la dependencia, porque me he dado cuenta de que ya a esa edad (5 y 3 años) el estar “conectadas” viendo lo que les gusta en internet les crea una necesidad de ver todos los videos del mundo en una sentada.
La gran pregunta es, entonces, ¿cuándo mis hijos pueden ser dueños de un dispositivo electrónico? Sé que esta interrogante llega a nuestra mente cada día y quizás comienzas a comparar los permisos y usos de los primos, amiguitos y de la sociedad en general. Luego de que me hice esta pregunta varias veces concluí que la respuesta no puede estar “en los demás”, sino en mi propio criterio como madre. Es verdad que el teléfono, por ejemplo, les ayuda a divertirse, es buenísimo para aprender, para estudiar y para estar en comunicación con los padres, pero también debemos tener en cuenta lo que implica el acceso de un menor a las redes sociales y a Whatsapp.
Por eso quiero compartir algunos hechos que he estado prestándole atención desde hace algún tiempo. Lecturas, estudios y algunas opiniones propias que espero te den más claridad sobre qué rumbo tomar en este tema tan delicado:
1. Tenemos que tener presente que también nosotros los padres debemos trabajar en tener control sobre el uso de nuestro teléfono y de hacer un esfuerzo por dejarlo atrás cuando estamos con nuestros hijos y con otras personas porque ellos ven nuestro ejemplo y al estar todo el tiempo conectados con el mundo virtual olvidamos las personas que están frente a nosotros, que nos necesitan, con las que podemos conectar en ese instante que no volverá.
2. Nancy Colier, autora de “El poder de apagar”, dice: “La única diferencia entre la adicción digital y otras adicciones es que este es un comportamiento socialmente aceptado”.
3. El “New York Times” citó en un artículo que el acceso casi universal a la tecnología digital, que comienza en edades cada vez más tempranas, está transformando la sociedad moderna de formas que pueden tener efectos negativos en la salud mental y física, el desarrollo neurológico y las relaciones personales.
4. La Academia Americana de Pediatría escribió: “Los niños que usan demasiado las redes sociales corren el riesgo de tener un uso problemático de la internet”. Como madre no le veo sentido a que un niño pequeño tenga cuentas de redes sociales, el peligro es inmenso.
5. Simon Sinek menciona en su famoso video “Millennials en el Trabajo” los efectos del celular en los jóvenes y habla de las adicciones. Menciona en su charla, cómo el ganar likes en redes sociales genera dopamina, el mismo neurotransmisor que se genera cuando alguien fuma, toma licor o apuesta.