Mié, 06/26/2019 - 09:00
- Para Padres
En la actualidad desarrollo de los niños se está viendo afectado por menos quienes nos imaginamos…¡Los padres!
Desde pequeños, parte de nuestra naturaleza humana es ser curiosos y descubrir todo lo que se encuentra en nuestro entorno. Los niños nacen queriendo saber todo y adquiriendo nuevas experiencias a través de sus sentidos.
Lamentablemente, existe un fenómeno bastante frecuente en los niños de edad preescolar en la que no se les permite hacer nada, o mejor dicho, no saben hacer nada.
Es cierto que desde temprana edad somos dependientes de papá y mamá o de quien sea que esté a nuestro cuidado; sin embargo, a medida que pasa el tiempo, los niños van desarrollando habilidades y destrezas las cuales le permiten convertirse en adultos independientes y responsables de sí mismos. Esto no esta sucediendo hoy en día, ya que los niños no conocen de independencia y se les sobreprotege de todo.
Hacerle todo a los niños no les facilita nada; al contrario, les hace ver que siempre habrá alguien allí para resolverles la vida. Al no permitirles intentar hacer las cosas solos, estamos creando inseguridad y ansiedad en ellos, ya que al encontrarse en una situación en la que tengan que tomar decisiones por sí mismos, no sabrán qué hacer debido a que siempre otros han tomado las decisiones por ellos.
Los adultos somos los encargados de modelar e inculcar todos los buenos hábitos, responsabilidades y fomentar a la independencia del niño. No es fácil, como padre o madre, ver a su hijo frustrado por que no puede lograr algo y prefieren “echarle una manito” y terminan haciendo todo por ellos, desde abrirles la galleta hasta ponerles la ropa, aunque ya tengan 9 años.
Claro, existen etapas del desarrollo en las cuales los niños van descubriendo y aprendiendo poco a poco, pero si esta oportunidad les es arrebatada, no serán entonces desarrolladas adecuadamente.“Pero es que ella no sabe hacerlo”, “pero es que si yo estoy aquí ¿para qué necesita hacerlo?”, dicen muchos adultos. Fomentar la independencia ayudará a que el niño pueda desarrollarse libremente y aprenda a vivir en el mundo real.
Los niños deben caerse y aprender a levantarse, a ensuciarse en el lodo y saber que todo estará bien, a cometer errores y aprender de ellos, a intentarlo las veces que sean necesarias hasta que lo logren... Nosotros estamos allí para ser una guía, no para entorpecer el proceso. Con esto no me refiero a que si ve que el niño se va a tirar de un mueble, no lo vaya a detener. No. Me refiero a que deje al niño ser.
He escuchado decir: "¡Pero es que no sabe hacer nada!" "¡Es una fresca!" "¡Quieren que todo se lo hagan!" La culpa no es de ellos, es de usted. Fue usted quien no le permitió aprender nada, porque no era “necesario” cuando estaba pequeño. Lo que no se inculca adecuadamente hasta de los 6 años, le será el triple de complicado inculcarlo cuando sea adolescente. No se trata de buscar culpables, sino de encontrar una solución a esta situación que cada vez es más frecuentes en edades preescolares. Sin autonomía no hay autoestima, y el niño siempre será emocionalmente inseguro de todo y de todos.
¿Qué nos lleva a sobreproteger?
En ocasiones, el abandono que sufrió alguno de los padres ocasiona sobreprotección; ya que al sentirse abandonado, no quiere que sus hijos atraviesen lo mismo.
El miedo a cometer errores o evitar el sufrimiento innecesario (emocionalmente hablando) de un hijo para cualquier padre es devastador; sin embargo, por más difícil que suene, no siempre podremos evitarlo.
En un mundo tan demandante no existe la paciencia con los niños, a veces los padres optan por hacerle todo para que no se demoren y no pierdan tiempo, sin percatarse que esto no beneficia a el niño.
¿Cómo puedo dejar de sobreproteger y fomentar la independencia a mi hijo?
- Nuestros niños son capaces de todo, no los límite, guíelos en el proceso.
- Los niños pueden, con nuestra ayuda, reflexionar para buscar una solución a un conflicto que tuvieron con un amigo, pero no tome la decisión por ellos. Permítales elegir cómo se sienten más cómodos.
- Los niños apartir de los 2 años de edad pueden aprender a vestirse solos, pues se encuentran en pleno desarrollo de sus habilidades motoras. Evidentemente, lo harán mal, les llevará tiempo y cometerán errores, pero con el tiempo podremos fomentar su autonomía y su sensación de logro.
- Los niños no necesitan ser perfectos para ser felices, permítales ser ellos.
- No proyecte su vida o sus malos recuerdos en sus hijos. Que le haya pasado a usted no siginifica que deba pasarle a su hijo también.
- Confie en la capacidad de su hijo. Nació, gateó, camino, corrió y se cayó. Le demostró que superó todas esas etapas, permítale vivir todas sus experiencias. Él quiere y puede aprender a progresar.
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