Aprende a combatir las hemorroides

Las hemorroides son la inflamación de venas en el sistema digestivo y aparecen por factores comunes dentro de la vida cotidiana al comer excesivamente alimentos altos en grasa, el sedentarismo, obesidad y beber poca agua. Esto provoca una inflamación estomacal, mala digestión y estreñimiento.

Esta enfermedad se conoce como pequeñas varices situadas en el canal anal o en la zona baja del recto, dilatándose y causando  malestares y sensación de ardor. Existen tres tipos de hemorroides, las externas, que se pueden ver y sentir y provocan mucho dolor; las internas que no se detectan a simple vista ni causan ninguna clase de síntomas,  pero se descubren a través de ligeros sangrado que aparecen  a la hora era de evacuar; y las trombosadas  que provocan un dolor intenso e inflamación, acumulando y formando coágulos de sangre.

“La enfermedad hemorroidal es una enfermedad benigna, de la cual es fundamental su diagnóstico correcto y oportuno, ya que no todo lo que sangra son hemorroides. Los síntomas se pueden confundir con cáncer anal o cáncer colorrectal” cita el Dr. Miguel Ángel Rosado en un artículo escrito por Susana Carrasco Merino en Su Médico. 

El doctor Armando Mendoza Sosa, especialista en cirugía del Instituto Mexicano del Seguro Social en Coahuila, señala que es importante no hacer esfuerzo al momento de defecar, evitar la automedicación con remedios caseros o pomadas que únicamente alivian las molestias pero no tienen efectos curativos y pueden ocultar un posible cáncer de colon o de recto.

Para beneficiar al sistema digestivo y tener una vida saludable se recomienda consumir comidas ricas en fibra como legumbres, frutos secos, frutas, vegetales de hoja verde e hidratarse constantemente, con un promedio de dos a tres litros de agua por día. Si se cena mucho se aconseja no sentarse ni acostarse de forma inmediata para esperar a que la comida se digiera. De no hacerlo, esto podrá causar un daño directo para el colon. Es importante eliminar de nuestra dieta comidas picantes, café o el alcohol.

Tanto hombres como mujeres  pueden sufrir de esta anomalía, pero las mujeres tienen mayor probabilidades de sufrir de ellas, especialmente si se encuentran embarazadas. Con la ayuda de una alimentación equilibrada y un tratamiento oportuno, se conseguirá erradicar la inflamación. Si se continúa con los síntomas se recomienda acudir al doctor para una revisión, descartando o confirmando si se debe a algún tumor (ya que estos se manifiestan por medio de la coagulación).