- Entrevistas
La cantautora panameña que ha llegado a la cima de las listas y romper paradigmas en la música. su don es tocar a las personas con sus canciones
El 3 de abril tuviste un “show” en el teatro Anayansi para celebrar tus 25 años de carrera. ¿Qué tuvo este concierto?
Fue un concierto superespecial que me tuvo muy emocionada, yo siempre, no solo con mi palabra, sino con mis hechos, he sido luz en la casa y luz en la calle. Los logros y momentos importantes los he compartido primero con Panamá, y siempre llevo el apellido Panamá conmigo donde vaya, cada paso que hago lo hago por y para mi país. Este es un día muy especial porque regresé al lugar donde todo comenzó, hace 25 años, canté como solista en un programa que se llamaba “Sábado Sensacional” debido a una gira que estaban haciendo por los 500 años de descubrimiento de América. Este concierto fue un regalo que hice a mí misma, de ver de dónde vengo y el recorrido que he hecho; nunca olvidarme de lo importante que es mi casa. Fueron 25 años llenos de risas, lágrimas, logros, momentos difíciles, aprendizajes, anécdotas, y todo eso lo van a ver en escena. Fue un recorrido larguísimo por todas las canciones que conocen en mi carrera como cantautora, por las canciones que me han grabado otros colegas, el porqué y para qué detrás de cada canción, mi historia de vida. Un concierto muy distinto a lo que han podido ver antes.
Como cantautora, ¿qué cosas te permiten estar en contacto con tus sentimientos?
Siempre le he dicho a la gente que la mujer ganó la experiencia de la vida, los golpes me han moldeado el alma, pero toda la vida he tenido a la niña despierta. Sigo viendo el mundo con ojos de maravilla, no he dejado que ningún golpe me intoxique, me corrompa, y es parte de mi forma de ser, cómo me criaron en mi casa, parte de mi pureza. Veo inspiración en todo, me entusiasma todo. Es algo con lo que nací, todo el mundo tiene sus talentos, el mío es ver emociones, sentirlas, traducirlas y llevarlas a letra y melodía. Y contar mis historias y la de los demás, y mi misión es hacerlo con responsabilidad y tocando el corazón.
¿Has pensado en componer en portugués?
Compongo en portugués de toda la vida, también en inglés, de hecho tengo artistas que me han grabado en Brasil y en el anglo. Ahora más que nunca estoy trabajando con esos mercados, “Despacito” abrió puertas en el mundo entero. Estaba antes más afincada en el mercado latino que era donde había echado raíces. El año pasado entré al Salón de la Fama de Compositores Latinos como la más joven en la historia, porque he tenido una carrera larga donde me he dedicado a escribir. Estoy trabajando en tres mercados al mismo tiempo.
¿Existe algún apego emocional con las canciones que escribes y otros las cantan?
Los hijos uno los trae al mundo, les enseña lo que les tiene que enseñar y los deja volar, y siempre van a hacer parte de ti. En mi caso, no tengo ego en lo que hago, cuando escribo algo para alguien lo escribo para que brille y para que se pueda expresar. Por eso está mi profesión en ese caso, está la Erika artista, que expresa lo que necesita, y la Erika compositora que es la traductora de sentimientos.
¿Cómo encuentras el tiempo para hacer tus producciones?
Ella me encuentra a mí, cuando paso por momentos determinados es mi forma de curar el dolor, mi forma de comunicarme es la música. Por ejemplo, hay canciones que escribí específicamente para el disco “Tatuajes”, porque necesite expresar alegría, curarme de algo y las dejé en un cajón porque eran canciones muy personales, que no pretendía que otro artista me fuera a grabar.
¿Qué representa tu último álbum ‘Tatuajes’?
Es una conquista maravillosa a nivel personal porque saqué muchas cosas a la luz, tanto lindas como difíciles, me di cuenta de que no era solo un desahogo personal, sino que era un deber. La canción “¿Cómo hubiera sido?” salió del momento en que pierdo la oportunidad de ser madre, porque perdí la matriz a los 35 años de edad. Yo me curo el alma haciendo esta canción, y cuando lo saco a la luz no sabía la cantidad de mujeres que habían pasado por algo parecido. Me doy cuenta de que soy una voz que las personas necesitan en su momento para poder salir adelante.
¿Pensaste en algún momento conectar tan profundamente?
Creo que es algo que no se planifica, cuando uno viene al mundo conecta con todo el mundo porque no está intoxicado de miedos e inseguridades. Sigo siendo esa niña y eso ha permitido que conecte con la gente, mi música la hago con el corazón abierto y la gente te abre el corazón de la misma manera.
Has mencionado que la canción “Despacito” nació orgánicamente, ¿te sientes presionada de hacer otro éxito?
No, todas las canciones que he creado son un éxito a su manera. Lo que pasa es que cada canción decide hasta dónde quiere volar, y el mundo también necesita de ciertas cosas en determinado momento. Qué suerte que fuimos los involucrados y que el mundo necesitaba de “Despacito”, no siento que esta canción tiene nada distinto a lo que me ha tocado escribir en canciones anteriores. He tenido gracias a Dios varios éxitos en mi carrera, como “5 minutos”, que estuvo dos semanas entera en la lista de los Billboard, que trajo al regreso a Gloria Trevi al mundo musical.
Estamos viviendo desigualdad salarial de géneros. ¿Ha afectado la industria musical?
La industria está altamente afectada, las mujeres somos minoría en muchos rubros. Pero tenemos que tomar en cuenta que la mujer se quedó por mucho tiempo en casa cuidando los hijos, entonces, las mujeres hemos querido salir ahora, sobre todo hay movimiento enorme de empoderamiento de la mujer, del que yo soy parte, pero no estoy de acuerdo con el atacar el hombre, porque muchos hombres han creído en mí y que me han abierto el paso y han grabado mis canciones. No veo este mundo como una competencia, veo el arte y el mundo como algo que se comparte. Te puedo decir que en mi caso, como mujer, no ha sido fácil llegar donde he llegado, y si yo lo hice, otras personas lo pueden hacer. Es muy importante que nos enfoquemos en los resultados, en hacer bien las cosas.
Si pudieras decirle algo a la Erika de hace 25 años, que no pensó en lo que sería hoy día...
Le diría: Te fui fiel y te cumplí todas las promesas, y lo seguiré haciendo.