Todo sobre la cerámica de pisos

En el mercado podrás encontrar muchas opciones de revestimiento para tus pisos, pero la verdad es que hay muchas cosas que tomar en cuenta a la hora de escoger alguno. Por esto te recomendamos continuar leyendo punto por punto lo que debes conocer antes de decidirte. 

¿La mejor opción?

Los cerámicos son una de las opciones más recomendadas en el Istmo. La primera razón es porque los cerámicos son considerados un revestimiento que se mantiene frío, y con el clima tropical de nuestro país, esto es necesario, incluso, el cerámico no atrapa olores, lo que lo hace la dupla ideal para la humedad. La segunda razón es que, en comparación con otros revestimientos, la cerámica es fácil de limpiar, funcional y económica. En el mercado tendrás dos grandes grupos: esmaltados y porcellanatos. El primero está compuesto por arcilla y un esmalte brillante o satinado. Por lo general son de uso doméstico, y son de bajo costo. Las dos ventajas más sobresalientes de este tipo son la variedad de colores y modelos, y su fácil colocación. El segundo tipo está compuesto por arcilla refinada y se caracteriza por una alta resistencia a los impactos. ¡Eso sí, gastarás un poquito más con esta opción!

Antes de colocarlos

Fabio Guerrini, socio de la empresa de revestimientos argentina SBG, recomendó algunas cosas en una entrevista con la revista especializada Espacio Living, ¡toma nota!

1. El producto que escojas tiene que ser apto para el ambiente donde se colocará.
2. La superficie del piso tiene que estar totalmente recta y debe ser de un material adecuado para colocar cerámicas.
3. Utiliza los pegamentos adecuados; en el mercado hay para porcellanato chico, piezas grandes y cerámica esmaltada.
4. Ten cuidado a la hora de comprar la pastina para las juntas. Debe ser una de buena calidad y adecuada para el tipo de cerámico que escogiste.

Limpieza práctica

Después de realizar la colocación, la revista especializada recomienda hacer una limpieza profunda con productos a base de ácidos. Esto te servirá para retirar los restos de materiales o sedimentos. Cuando vayas a comprar, ten en cuenta que hay algunos que pueden dañar la superficie del cerámico, lee bien las etiquetas. Después, en las limpiezas rutinarias solo necesitas un producto desengrasante y un paño limpio. Los cerámicos también son fáciles de barrer y trapear, pero sí demoran un poco en secarse.