Depresión después del parto

Mar, 04/19/2016 - 18:45
Lo que parecía ser una alegría pura en tu vida, se convirtió en amargura y tu estado parece no tener explicación.
Foto: norbapsicologos.com

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Todas las madres pri-merizas pasan por el `shock' de descubrir lo difícil que es la maternidad, todas están cansadas y mal dormidas. Pero no todas sienten que el mundo se les cae encima cuando ya han pa-sado varios meses desde el parto, ni sufren ataques de cólera contra su esposo, ni están convencidas de que son unas madres terribles, a pesar de que se desviven día y noche por su bebé. Mi hijo tenía ya nueve meses cuando un día, mientras lo columpiaba en el parque, se me saltaron las lágrimas por enésima vez, sin que las provocara ningún mo-tivo en especial, y me di cuen-ta, por fin, de que mi estado no era normal. Concerté una cita con una psicóloga", escribió Isidra Mencos en el blog "Historias de mamá" del por-tal Baby Center.

A Isidra le diagnosticaron depresión posparto, una condición que sufre alrededor del lo% al 2o% de las mujeres en los tres primeros meses después de dar a luz. Se trata de una depresión moderada a profunda, es una especie de prolongación de lo que se conoce como "depresión puerperal" o en inglés "baby blues". Esta última condición es normal en todas las mu-jeres y suele durar unos pocos días, casi el 6o% de las féminas la experimentan. Los síntomas suelen ser irritación emocional, ansiedad, tristeza y llantos sin aparente motivo.

Según los expertos, no hay motivos claros de por qué las mujeres padecen esta condición. Muchos alegan que se debe al cambio hormonal que existe después de dar a luz, además de los cambios que se dan en la mujer, tanto en su ámbito social como relacional y físico.

¿Cómo sé si la tengo?

Si tienes algunos síntomas de los que mencionamos antes y persisten por más de tres semanas, entonces, es recomendable que consultes a un médico o psicólogo.

Actualmente, muchos expertos en salud mental utilizan un test llamado Escala de Depresión Postnatal de Edimburgo, que consiste en lo preguntas con respuestas que cuentan con una puntuación determinada. Si el paciente alcanza cierta puntuación, entonces, se diagnostica la condición específica.

Pero más allá de padecerla, lo importante es saber que se puede tratar. Por lo general, el tratamiento de la depresión posparto incluye medicamentos y terapia psicológica. En la mayoría de los casos se utiliza la terapia conductual cognitiva (TCC) y la terapia interpersonal (TIP).

Para aquellas que ya se encuentran en esta situación, Medline Plus, el servicio de la Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., ofrece varios consejos para afrontarla:

  • Pide ayuda a tu esposo, familia y amigos para ocuparse de las necesidades del bebé y del hogar.

  • No escondas tus sentimientos, es necesario que hables de lo que ocurre con tus seres más cercanos. 

  • No hagas ningún tipo de cambio drástico en esta etapa, como por ejemplo cambiar de trabajo, mudarte de casa o cambiar de ciudad.

  • Descansa y trata de distraer-te saliendo o realizando acti-vidades que disfrutes.

  • Únete a un grupo de apoyo o conversa sobre tu situación con otras madres que hayan pasado por esto antes. 

Consejos para tu esposo

Si tu esposa está atravesando una etapa similar a la que hemos descrito, te daremos algunos consejos para guiar tu comportamiento durante esta crisis. Un estudio de la Facultad de Medicina del Este de Virginia reveló que uno de cada diez padres sufre depresión pos-parto, y que es más frecuente en aquellos hombres que son pareja de una mujer que también sufre la condición. Por esta razón, es importante que los hombres estén atentos y traten de: 

1. Aliviar los sentimientos de culpa de su esposa: no entres en discusiones, recuérdale su valor y recalca que desempeña bien su rol como madre. 

2. Investiga más sobre esta condición: el conocer más sobre esta etapa te permitirá entender mejor a tu pareja y ayudarla en el proceso de recuperación. Lo mejor es conversar con algún psicólogo o médico especializado. 

3. Busca tratamiento profe-sional y acompáñala: no la de-; jes sola, realiza la terapia con ella; de esta manera, podrás prever el hecho de padecer tú lo mismo y además, harás sentir segura a tu esposa. 

 
 
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