¡Aprende a elegir el color de tu habitación!

Jue, 03/17/2016 - 16:04

 

 

Muchas preguntas nos hacemos al momento de cambiar el color de nuestra casa o apartamento, porque intuimos que esta decisión puede afectar nuestra armonía y estado de ánimo. Lo que pareciera una resolución estética es en realidad un tema para meditar con calma, ya que los tonos están directamente ligados a nuestra personalidad y aficiones.

Una decoración llevada a cabo en unos u otros tonos pueden transmitirnos precisamente la alegría que nos falta, o la tranquilidad que necesitamos.

La escogencia del color también tiene que ver con la creación de efectos visuales y espaciales, ayudándonos a dar sensaciones de profundidad, amplitud y altura, entre otras. Es bueno tomarse un tiempo para pensar en qué es lo que se necesita: ¿relajación o energía?

Si deseas crear un micromundo para olvidarte del caos externo, es conveniente utilizar una gama de colores que transmitan relajación, como la familia de los azules o violetas, que acompañados de suaves matices en verde o café, te harán sentir en una habitación ordenada, orgánica y contacto con la naturaleza.

Blanco: Es color estimulante y fresco. Favorito de muchos por sus numerosas virtudes: aporta amplitud y es sinónimo de limpieza. Es aislante del calor, difunde la luz, y combina con todo. A pesar de que es más difícil de mantener, es una apuesta segura a la hora de decorar espacios reducidos.

 

Azul: Tiene la particularidad de ser refrescante y relajante. Transmite protección y confianza. Dependiendo de su intensidad estimula a la competitividad y esmero.

 

Naranja: Está asociado al bienestar, alegría y diversión. Agrega volumen a las superficies y crea una sensación de aumento de temperatura. Hay estudios que afirman que ayuda a realizar la digestión, por lo que es recomendable utilizarlo en comedores y cocinas. Está además relacionado con el ingenio y creatividad.

 

Rojo: Transmite vitalidad, energía y pasión. Por su fuerza es aconsejable utilizarlo con moderación, en una sola pared o en accesorios de acento como en sillas, cuadros o alfombras. Es también considerado un tono alegre y enérgico, a veces asociado a la riqueza, lujuria y carácter dominante.

 

Negro: A pesar de su connotación negativa en algunas sociedades, se suele asociar con elegancia y minimalismo. Debe evitarse como base porque opaca a los otros tonos y concentra el calor. Sin embargo, se puede jugar con sus contrastes o utilizarlo en detalles para agregar una sensación de sofisticación

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