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Antes de recibir esta muestra en el banco de semen, los donantes deben pasar por un estudio previo, físico, psicológico y pruebas genéticas para descartar cualquier patología.
La fertilidad de una persona o de una pareja puede verse afectada por la edad o por ciertas enfermedades que hacen que concebir se convierta en un reto, de ahí que existan los tratamientos de reproducción asistida y en algunas ocasiones tengan que recurrir al banco de semen.
Pero ¿En qué casos deben buscar este tipo de solución? el Dr. Saúl Barrera, director de IVI Panamá, indica que los pacientes pueden acudir a un banco de semen después de presentar las siguientes condiciones:
- Cuando el semen de su pareja es muy patológico y ha logrado malos resultados en la Fecundación in Vitro.
- En ausencia de espermatozoides (azoospermia) tanto en eyaculado como en la biopsia de testículo (procedimiento ambulatorio con anestesia local).
- Cuando el varón es portador de una enfermedad genética que no puede ser estudiada en los embriones.
- Si el varón es portador de una enfermedad de transmisión sexual y no es posible eliminar el virus del semen.
- En caso de que se detecten anomalías cromosómicas en el semen.
- Cuando el varón tiene un grupo sanguíneo positivo (estado homocigoto) y el de la mujer es negativo, además de estar isoinmunizada (produce anticuerpos contra los glóbulos rojos del feto con grupo sanguíneo positivo).
- Y en caso de mujeres sin pareja.
Función y seguridad de un banco de semen
“El 16% de los pacientes que visitan IVI Panamá para someterse a un tratamiento de reproducción asistida, requieren la utilización del banco de semen. IVI Panamá cuenta con un banco de semen internacional que abrió sus puertas en el año 2008 con muestras procedentes de España, Estados Unidos y ahora estaremos abriendo la recolección de muestras locales”, señala el Dr. Barrera
Antes de recibir esta muestra en el banco de semen, los donantes deben pasar por un estudio previo, físico, psicológico y pruebas genéticas para descartar cualquier patología. Los donantes siempre están informados de las pruebas que se le van a realizar, la frecuencia con la que deben acudir al centro de reproducción asistida, el tiempo de abstinencia sexual previo a la entrega de muestras, y de los controles serológicos periódicos.
Entre los estudios que se le realiza al donante para garantizar la calidad de semen están pruebas de VIH, hepatitis C, hepatitis B, HTLV y sífilis, entre otros. Además de exámenes para descartar otras enfermedades hereditarias, como labio leporino, espina bífida, malformación cardíaca congénita, hemofilia, diabetes, epilepsia, psicosis y otras enfermedades con componente genético.
Luego de estos estudios, las muestras sanas se congelan y almacenan en el banco por un periodo de 6 meses; pasado este tiempo, se repiten las pruebas para comprobar que en un inicio el donante no estaba en alguna fase inicial de cualquier tipo de infección.
Una vez se ha comprobado la ausencia de enfermedades y la adecuada tolerancia del semen a la congelación conservando su calidad, las muestras se liberan para su uso en tratamientos de fertilidad, ya sea en una inseminación intrauterina, fertilización in vitro o una ovodonación.
Estos donantes son varones mayores de edad y hasta los 35 años con un buen estado de salud físico y mental, que de forma anónima y desinteresada donan su esperma para que mujeres sin pareja o pacientes donde el varón presenta anomalías de diferente índole sin solución como el factor masculino severo, tengan la posibilidad de cumplir su sueño de ser madres y padres.
¿Qué se necesita para ser receptor del banco de semen?
Una de las dudas que siempre surge cuando se recurre a un tratamiento de reproducción asistida con banco de semen, es el parecido físico con el padre, para esto los encargados de seleccionar el semen donado, tienen la tarea de buscar un donante con características compatibles con los pacientes. Uno de los aspectos más importante es el grupo sanguíneo que debe ser igual al de los padres. También se toma en cuenta los rasgos físicos como la estatura, el peso, la raza, el color de la piel, el cabello y los ojos del donante.
La idea de que un hijo no vaya a contar con el material genético de uno o de ambos padres, genera tristeza, miedo y dolor. Estas dudas y miedos son conocidos como duelo genético. Para los pacientes o parejas que van a someterse a algún tratamiento de reproducción asistida con ayuda del banco de semen, estará disponible la Unidad de Apoyo Psicológico de IVI donde se le ayudará a afrontar esta decisión.
Con los estudios que se le realiza al donante para garantizar la calidad de semen, el laboratorio de IVI Panamá podrá encontrar las compatibilidades más adecuadas para realizar el tratamiento de reproducción asistida requerido con semen de donante. Además, los receptores deberán firmar la solicitud y el consentimiento informado para realizar el tratamiento.
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