- Salud
El nacimiento de un bebé puede desencadenar una mezcla de fuertes emociones, desde el entusiasmo y la alegría hasta el miedo y la ansiedad. Sin embargo, puede derivar en algo que podrías no esperar: la depresión.
La mayoría de las madres primerizas sienten melancolía posparto después del nacimiento del bebé, que generalmente incluye cambios en el estado de ánimo, episodios de llanto, ansiedad y dificultad para dormir. La melancolía posparto generalmente empieza dentro de los primeros dos o tres días después del parto, y puede durar hasta dos semanas.
Sin embargo, algunas madres primerizas padecen una forma de depresión más grave y de mayor duración, conocida como depresión posparto. Con poca frecuencia, después del parto, también se puede desarrollar un trastorno extremo del estado de ánimo llamado psicosis posparto.
La depresión posparto no es un defecto de carácter o una debilidad. A veces, se trata simplemente de una complicación del parto. Si tienes depresión posparto, un tratamiento inmediato puede ayudarte a controlar los síntomas y a crear un vínculo con tu bebé.
Síntomas
Los signos y síntomas de la depresión posparto varían y pueden oscilar entre leves y graves.
Síntomas de la melancolía posparto
Los signos y síntomas de la melancolía posparto (que duran de unos pocos días a una o dos semanas después del nacimiento del bebé) pueden incluir:
- Cambios de humor
- Ansiedad
- Tristeza
- Irritabilidad
- Sentirse abrumado
- Llanto
- Concentración reducida
- Problemas de apetito
- Problemas para dormir
Síntomas de depresión posparto
La depresión posparto puede confundirse con la melancolía del bebé al principio, pero los signos y síntomas son más intensos y duran más tiempo y, eventualmente, pueden interferir en la capacidad para cuidar al bebé y realizar otras tareas diarias. Los síntomas generalmente se desarrollan dentro de las primeras semanas después del parto, pero pueden comenzar antes, durante el embarazo, o más tarde (hasta un año después del nacimiento).
Los signos y síntomas de la depresión postparto pueden incluir los siguientes:
- Estado de ánimo deprimido o cambios de humor graves
- Llanto excesivo
- Dificultad para relacionarse con el bebé
- Aislarse de familiares y amigos
- Pérdida del apetito o comer mucho más de lo habitual
- Incapacidad para dormir (insomnio) o dormir demasiado
- Fatiga abrumadora o pérdida de energía
- Interés y placer reducidos en las actividades que solías disfrutar
- Irritabilidad y enojo intensos
- Miedo a no ser una buena madre
- Desesperanza
- Sentimientos de inutilidad, vergüenza, culpa o insuficiencia
- Disminución de la capacidad de pensar con claridad, concentrarse o tomar decisiones
- Inquietud
- Ansiedad grave y ataques de pánico
- Pensamientos acerca de lastimarte a ti misma o al bebé
- Pensamientos recurrentes de muerte o suicidio
Si no se trata, la depresión posparto puede durar muchos meses o más.
Psicosis posparto
Con la psicosis posparto, un trastorno poco común que generalmente se desarrolla dentro de la primera semana después del parto, los signos y síntomas son graves. Entre los signos y síntomas pueden encontrarse los siguientes:
- Confusión y desorientación
- Pensamientos obsesivos acerca de tu bebé
- Alucinaciones y delirios
- Alteraciones del sueño
- Exceso de energía y agitación
- Paranoia
- Intentos de lastimarte a ti misma o a tu bebé
La psicosis posparto puede causar pensamientos o conductas que ponen en peligro la vida y requiere tratamiento inmediato.
Depresión posparto en hombres que fueron padres
Los hombres que fueron padres también pueden experimentar depresión posparto. Pueden sentirse tristes o tener cansancio, estar abrumados, experimentar ansiedad o sufrir cambios en sus patrones habituales de sueño y alimentación (los mismos síntomas que experimentan las madres con depresión posparto).
Los padres que son jóvenes, tienen una historia clínica de depresión, experimentan problemas en las relaciones o tienen dificultades financieras presentan un mayor riesgo de sufrir depresión posparto. La depresión posparto en los hombres (a veces denominada depresión posparto paterna) puede tener el mismo efecto negativo en las relaciones de pareja y en el desarrollo del niño que la depresión posparto en las madres.
Si eres un hombre que fuiste padre y tienes síntomas de depresión o ansiedad durante el embarazo de tu pareja o en el primer año después del nacimiento de tu hijo, habla con el profesional de la salud. El apoyo y los tratamientos similares brindados a las madres con depresión posparto pueden ser beneficiosos para tratar la depresión posparto en padres.
Cuándo debes consultar con un médico
Si te sientes depresiva luego del nacimiento de tu hijo, puedes sentirte reacia o avergonzada de admitirlo. Sin embargo, si experimentas algún síntoma de tristeza posparto o depresión posparto, llama a tu médico y coordina una consulta. Si tienes síntomas que sugieren una psicosis posparto, busca ayuda de inmediato.
Es importante que llames a tu médico tan pronto como puedas si los signos y síntomas de la depresión tienen estas características:
- No desaparecen después de dos semanas
- Empeoran
- Te dificultan el cuidado de tu bebé
- Te dificultan completar las tareas diarias
- Incluyen pensamientos acerca de lastimarte a ti misma o a tu bebé
Si tienes pensamientos suicidas
Si en algún momento piensas en hacerte daño o dañar a tu bebé, busca inmediatamente la ayuda de tu pareja o tus seres queridos para que cuiden a tu bebé y llama al 911 o a tu número de asistencia de emergencia local para obtener ayuda.
Asimismo, considera estas opciones si tienes pensamientos suicidas:
- Busca la ayuda de tu médico de atención primaria u otro profesional de la salud.
- Llama a un profesional de la salud mental.
- Llama a la línea directa de asistencia al suicida.
- Ponte en contacto con un ser querido o amigo cercano.
- Comunícate con un religioso, un líder espiritual o alguna otra persona de tu comunidad religiosa.
Ayudar a un amigo o ser querido
Las personas con depresión pueden no reconocer o admitir que están deprimidas. Es posible que no sepan cuáles son los signos y síntomas de la depresión. Si sospechas que un amigo o ser querido tiene depresión posparto o está desarrollando psicosis posparto, ayúdalo a buscar atención médica de inmediato. No esperes y anheles la mejora.
Causas
No existe una sola causa de la depresión posparto, pero las cuestiones físicas y emocionales pueden contribuir.
- Cambios físicos. Después del parto, una caída dramática en los niveles de hormonas (estrógeno y progesterona) en el cuerpo puede contribuir a la depresión posparto. Otras hormonas producidas por la glándula tiroides también pueden bajar marcadamente, lo que puede provocar que sientas cansancio, pereza y depresión.
- Problemas emocionales. Cuando estás con falta de sueño y abrumada, puedes tener problemas para manejar hasta los problemas menores. Es probable que estés ansiosa acerca de tu capacidad para brindar cuidados a un recién nacido. Puedes sentirte menos atractiva, enfrentar tu sentido de identidad o sentir que has perdido el control de tu vida. Cualquiera de estos problemas pueden contribuir a la depresión posparto.
Factores de riesgo
Una madre reciente puede experimentar depresión posparto. Esta se puede manifestar después del nacimiento de cualquiera de sus hijos, no solo del primero. Sin embargo, el riesgo aumenta si reúnes alguna de estas características:
- Tienes antecedentes de depresión, ya sea durante el embarazo o en otros momentos
- Tienes trastorno bipolar
- Tuviste depresión posparto después de un embarazo anterior
- Algún miembro de tu familia tuvo depresión u otros trastornos del estado de ánimo
- Pasaste por momentos estresantes durante el año anterior, como complicaciones durante el embarazo, una enfermedad o la pérdida del trabajo
- Tu bebé tiene problemas de salud u otras necesidades especiales
- Tienes mellizos, trillizos o tuviste otro parto múltiple
- Tienes problemas para amamantar
- Tienes problemas en la relación con tu cónyuge o pareja
- Tienes un sistema de apoyo insuficiente
- Tienes problemas económicos
- Fue un embarazo no planificado o no deseado
Complicaciones
Si no se trata, la depresión posparto puede interferir en el vínculo entre madre e hijo y causar problemas familiares.
- Para las madres. La depresión posparto no tratada puede durar meses o más, y en ocasiones convertirse en un trastorno depresivo crónico. Incluso cuando se la trata, la depresión posparto aumenta el riesgo de futuros episodios de depresión mayor.
- Para los padres. La depresión posparto puede tener un efecto dominó, y causar tensión emocional en todas las personas cercanas a un nuevo bebé. Cuando una nueva madre está deprimida, el riesgo de depresión en el padre del bebé también puede aumentar. Y los nuevos papás ya tienen un mayor riesgo de depresión, ya sea que su pareja se vea afectada o no.
- Para los niños. Los hijos de madres que tienen depresión posparto no tratada tienen más probabilidades de tener problemas emocionales y de comportamiento, como dificultades para dormir y comer, llanto excesivo y retrasos en el desarrollo del lenguaje.
Prevención
Si tienes antecedentes de depresión, especialmente la depresión posparto, consulta con el médico si estás planeando quedar embarazada o tan pronto como descubras que estás embarazada.
- Durante el embarazo, el médico puede supervisarte minuciosamente para verificar si existen signos y síntomas de depresión. Puede hacerte completar un cuestionario para detectar la depresión durante el embarazo o luego del parto. A veces, la depresión leve puede tratarse con grupos de apoyo, terapia psicológica u otros tipos de terapia. En otras ocasiones, pueden recomendarte tomar antidepresivos, incluso durante el embarazo.
- Después de que nazca tu hijo, es posible que el médico te recomiende chequeos posparto tempranos para detectar signos y síntomas de la depresión posparto. Cuanto más rápido se detecta, más rápido puede iniciarse el tratamiento. Si tienes antecedentes de depresión posparto, el médico puede recomendarte un tratamiento con antidepresivos o psicoterapia inmediatamente después del parto.
Diagnóstico
El médico generalmente hablará contigo acerca de tus sentimientos, pensamientos y salud mental para distinguir entre un caso de melancolía posparto a corto plazo y una forma de depresión más grave. No te avergüences, la depresión posparto es común. Comparte tus síntomas con el médico para que pueda crear un plan de tratamiento útil para ti.
Como parte de la evaluación, el médico puede:
- Hacer una prueba de detección de depresión que incluya un cuestionario
- Ordenar un análisis de sangre para determinar si una tiroides poco activa está contribuyendo a los signos y síntomas
- Ordenar otras pruebas, si están justificadas, para descartar otras causas para los síntomas
Tratamiento
El tiempo de tratamiento y recuperación varían según la gravedad de la depresión y las necesidades individuales. Si tiene una tiroides poco activa o una enfermedad de base, el médico puede tratar esos trastornos o derivarte al especialista correspondiente. Es posible que el médico te derive a un profesional de la salud mental.
Melancolía materna
Generalmente, la tristeza materna se atenúa sola después de unos pocos días a una o dos semanas. Mientras tanto, debes hacer lo siguiente:
- Descansa todo lo que puedas.
- Acepta ayuda de tus familiares y amigos.
- Conéctate con otras madres primerizas.
- Dedica tiempo a cuidar de ti misma.
- Evita el consumo de alcohol y drogas recreativas que pueden empeorar tu estado de ánimo.
Depresión posparto
En general, la depresión posparto se trata con psicoterapia (también llamada terapia de conversación o apoyo psicológico), medicamentos, o ambos.
- Psicoterapia. Quizás te sirva hablar sobre tus preocupaciones con un psiquiatra, un psicólogo u otro profesional de salud mental. A través de la terapia, puedes encontrar mejores formas de afrontar tus sentimientos, resolver problemas, plantear objetivos realistas y responder a situaciones de manera positiva. A veces, la terapia familiar o de pareja también puede ayudar.
- Antidepresivos. El médico puede recomendarte un antidepresivo. Si estás amamantando, cualquier medicamento que tomes pasará a la leche materna. Sin embargo, la mayoría de los antidepresivos se pueden tomar durante la lactancia con poco riesgo de producir efectos secundarios para el bebé. Colabora con el médico para evaluar los posibles riesgos y beneficios de los antidepresivos específicos.
Con el tratamiento correspondiente, los síntomas de la depresión posparto suelen mejorar. En algunos casos, la depresión posparto puede continuar, y volverse una depresión crónica. Es importante continuar el tratamiento incluso después de comenzar a sentirte mejor. Suspender el tratamiento demasiado pronto puede provocar una recaída.
Psicosis posparto
La psicosis postparto requiere tratamiento inmediato, generalmente en el hospital. Entre los tratamientos pueden incluirse los siguientes:
- Medicamentos. El tratamiento puede precisar una combinación de medicamentos, como antipsicóticos, estabilizadores del estado de ánimo y benzodiacepinas, para controlar los signos y los síntomas.
- Terapia electroconvulsiva. Si la depresión posparto es grave y sufres de psicosis posparto, se puede recomendar la terapia electroconvulsiva si los síntomas no responden al medicamento. La terapia electroconvulsiva es un procedimiento en el que pequeñas corrientes eléctricas se trasmiten al cerebro y así se provoca intencionalmente una convulsión breve. Al parecer, la terapia convulsiva produce cambios en la química del cerebro que pueden reducir los síntomas de la psicosis y la depresión, en especial cuando otros tratamientos no han sido efectivos.
El tratamiento de la psicosis posparto puede dificultar la capacidad de lactancia de la madre. La separación del bebé dificulta la lactancia y algunos medicamentos que se utilizan para tratar la psicosis posparto no se recomiendan para las madres que amantan. Si sufres de psicosis posparto, el médico puede ayudarte a superar estos desafíos.
Estilo de vida y remedios caseros
Además del tratamiento profesional, puedes hacer cosas por ti mismo que colaboren con el plan de tratamiento y ayuden a acelerar la recuperación.
- Elije un estilo de vida saludable. Incluye actividad física, como caminar con tu bebé, y otras formas de ejercicios en tu rutina diaria. Intenta tener un buen descanso. Ingiere alimentos saludables y evita el consumo de bebidas alcohólicas.
- Establece expectativas realistas. No te presiones para hacerlo todo. Reduce tus expectativas de una familia perfecta. Haz lo que puedas y deja el resto.
- Tómate un tiempo. Tómate un tiempo y sal de tu casa. Eso significa pedirle a tu pareja que cuide al bebé o arreglar con una niñera. Haz algo que disfrutes, como un pasatiempo o alguna forma de entretenimiento. También puedes programar tiempo a solas con tu pareja o tus amigos.
- Evita la soledad. Habla con tu pareja, familiares y amigos acerca de cómo te sientes. Pregúntales a otras madres sobre sus experiencias. Romper con la soledad puede ayudarte a sentirte una persona nuevamente.
- Pide ayuda. Intenta sincerarte con las personas que son cercanas a ti y hazles saber que necesitas ayuda. Si alguien se ofrece a cuidar de tu bebé, permíteselo. Si puedes dormir, toma una siesta, o quizás puedas ver una película o juntarte a tomar un café con amigos. También puedes sacar provecho al pedir consejos relacionados con las aptitudes para la crianza que pueden incluir técnicas de cuidado para mejorar el sueño del bebé y aliviar su molestia y llanto.
Recuerda que cuidar al bebé incluye cuidarte a ti misma.
Estrategias de afrontamiento y apoyo
El período posterior al nacimiento de un bebe, que ya es estresante y agotador, se hace más difícil cuando aparece la depresión. Sin embargo, recuerda que la depresión posparto nunca es culpa de nadie. Es una enfermedad frecuente que requiere tratamiento.
Por eso, si tienes problemas para enfrentar la depresión posparto, habla con un terapeuta. Pregúntale a tu médico o a tu terapeuta sobre grupos de apoyo locales para madres que recién tuvieron hijos o para mujeres que padecen depresión posparto.
Cuanto antes obtengas ayuda, más pronto reunirás todas las herramientas necesarias para enfrentar la depresión y disfrutar de tu nuevo bebé.
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