- Mente y Cuerpo
La prevención es un detalle muy importante en diversos temas, en especial si se trata de la salud. Conoce qué hacer para evitar infecciones.
Cerca de la mitad de la población femenina, en todo el mundo, alguna vez en la vida ha sufrido de infecciones vaginales. La mayoría de las veces el desconocimiento por no saber cómo tener una higiene adecuada es lo que desencadena las infecciones.
Para prevenir este tipo de situaciones, que resultan tan incómodas, es importante mantener una sensación de limpieza y frescor durante toda el día, para ello hay que tener precaución a la hora de escoger los productos que vamos a utilizar para que no afecten al pH de nuestra zona vaginal y no generar infecciones, irritaciones o molestias.
Los ginecólogos también son enemigos de los tampones, por varias razones, primero porque ya está demostrado que estos pueden provocar molestias y reacciones, guardan mucho la humedad y el cuerpo lo reconoce como un objeto extraño y no se acostumbra a ellos. También está el hecho de que las mujeres no los utilizan de la manera correcta.
No hay que olvidar que los genitales siempre están en contacto con el flujo vaginal, con la orina, el sudor, la menstruación, y como si fuera poco es una zona con cero ventilación, todo esto trae consigo u ocasiona bacterias e infecciones.
Por todos estos motivos es que los ginecólogos reafirman la necesidad de limpieza en esta delicada parte del cuerpo, aunque el organismo tenga mecanismos de protección.
Con agua y jabón es suficiente
La limpieza de esta zona sólo requiere de agua y jabón neutro, con esto basta para evitar infecciones.
- El uso de jabón con aroma para la zona genital no es aconsejable, ya que contienen propiedades irritantes.
- Cambios hormonales, debido distintos motivos, menopausa, menstruación, problemas de tiroides...
- Utilizar ropa muy ajustada y que no sea de algodón favorece las molestias genitales.
- Durante la menstruación hay que prestar especial atención a la higiene íntima, el no cambiar el tampón o la toalla sanitaria con frecuencia ocasiona malos olores e infecciones.
- Las duchas directamente sobre la zona vaginal no son buenas, ya que puede ocasionar que la vagina se reseque y se elimine su barrera natural.
- Para la limpieza de tus genitales, los ginecólgos recomiendan usar directamente la mano, no esponjas ni guantes sintéticos.
- La higiene del ano realizarla hacia atrás, así se evitará que la vagina entre en contacto con los gérmenes de las heces.
Si alguna vez tu fluido vaginal es más espeso, diferente al color habitual y con olor más fuerte, seguramente padezcas una infección genital, debes acuidir inmediatamente al ginecólogo para que te recomiende el tratamiento más eficaz.
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