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Un vivaz tono que te ayudará a crear distintos ambientes, la intención dependerá del matiz que elijas cuando estés decorando tu rincón.

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Los años setenta fueron marcados por vibrantes colores como los púrpuras, fucsias, azules y naranjas; utilizados en todas partes como moda, maquillaje y arte. Ahora retomamos los naranjas para convertirlos en el centro de atención de nuestra decoración. Puede que no te atrevas a incorporar esta tonalidad a tu hogar, aquí te daremos algunos consejos para que este tono reine en tu hogar.
El naranja es un color tan amplio, que te permitirá expresarte a través de sus distintos matices. Todo dependerá del significado que quieras darle al espacio que decoras. Por ejemplo, si eliges una pintura mandarina, crearás un ambiente acogedor, caluroso y confortable, que transmitirá seguridad. A diferencia de los tonos más encendidos, los cuales te ayudarán a evocar lo exótico, moderno y dinámico, sin ser un color tan agresivo como el rojo.
Si lo que deseas es dar acentos de color, entonces debes tomar en cuenta las texturas que tienes en tu hogar. Los expertos recomiendan usar madera, preferiblemente las de tonos oscuros como nogal, teca y wengué, ya que te permitirán un rico contraste. Si estas no combinan con el interior de tu hogar, entonces elige un naranja más quemado, y la madera que puedes escoger es una clara, tipo arce o haya. Lo que nunca debes utilizar son las maderas intermedias, que se confundan con el color, ya que la pintura debe ser la que destaque. Otra manera de incorporarlo es en áreas externas de tu casa, como en terrazas, patios, etc. Dependiendo de tus mezclas, propiciarás un ambiente de calidez y energía.
Ahora hablaremos un poco del interior del hogar: la decoración de tu recámara. En las habitaciones de adolescentes es apropiado por sus toques modernos y llamativos que seducirán a tus hijos, a la vez que potenciará su creatividad y su vitalidad. En las habitaciones de adultos, también puede estar presente, aunque en pequeñas pinceladas de tonos más suaves como el albaricoque o el salmón. Utilizarlo en alfombras, muebles, tejidos, sillas, cortinas son opciones amigables para crear atmósferas llenas de vida.
Este color te ayudará a crear ambientes orientales, por ejemplo, añade estatuas u objetos con toques árabes o asiáticos, y ya tendrás una decoración única. Si prefieres un estilo retro, puedes mezclar muebles vintage y objetos de plástico o de plexiglás. Si recuerdas, los tonos marrones y púrpuras combinan a la perfección con el anaranjado y ayudan a crear un excelente ambiente sesentero.
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