6 tips de alimentación sana mientras haces teletrabajo

Mantener los parámetros de alimentación sana en estos tiempos se ha convertido en un verdadero reto para algunos debido a que la dinámica de trabajo - casa - familia de una u otra manera se ha entrelazado más de lo normal.

Es por esto que en esta nota te brindaremos algunos consejos para que puedas mantener un estilo de vida sano mientras cumples con todos estos roles desde casa.

1. Mantén una rutina de comidas: en vista de que en estos momentos no es tan imperativo madrugar para llegar al trabajo, aprovechamos a dormir y disfrutar un poquito más del descanso; sin embargo, puede que estemos restándole importancia y tiempo a la preparación del desayuno, obviándolo o comiendo más tarde, lo que en consecuencia promoverá que el resto de nuestras comidas como el almuerzo y la cena, se desplacen a horas más tardes. Ante esto recomendamos mantener una rutina de comidas como lo teníamos cuando asistíamos a la oficina; fija los horarios para comer y procura respetarlos lo más que se puedas.

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2. Planifica tus comidas de la semana: incluye preparaciones que sean sencillas pero nutritivas, es decir, que no te quiten mucho tiempo pero sean completas con almidones, proteínas, vegetales y grasas sanas. Esto, sin duda, ayudará a nivelar la presión que a veces sentimos al hacer pausas en nuestra jornada de trabajo para cocinar y comer; quizás ya te ha pasado que sientes que te distrae y te resta mucho tiempo de productividad en el trabajo, pero alimentarte de forma adecuada es importante también para tener buenos resultados en tus obligaciones laborales.

Además, puedes organizar las comidas desde el día anterior, o hacer “meal prep” los fines de semana o días libres, de modo que ya tengas disponible alimentos que requieran un mínimo de cocción. Esto equivale a  menos tiempo.

 

3. Haz meriendas si las necesitas: estas son herramientas útiles para recargarnos de energía y calmar la fatiga en nuestra jornada; sin embargo, no son obligatorias en una alimentación sana. Procura tomarlas si en realidad sientes que las necesitas, puedes incluir: frutas frescas, frutos secos como almendras o maní, yogurt con chía y miel natural, licuados, entre otros.

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4. No dejes de tomar agua: otra de los hábitos que puede afectarse en esta dinámica en casa es el de no tomar agua. Para muchos ya era costumbre en sus lugares de trabajo tomar la cantidad adecuada en el día, pero estando en casa puede que haya cambiado un poco esto.

Te recomendamos que antes de iniciar tus labores en la mañana, incluyas dentro de tu rutina buscar un envase, vaso o similar y establecer metas de cantidades a ingerir en el primer bloque de la mañana, en la tarde y en la noche. Por ejemplo: tomar 1 litros de agua desde las 8am hasta las 1:00pm, hora del almuerzo.

 

5. Controla las porciones: es una realidad que nuestro nivel de actividad física cotidiana probablemente ha disminuido considerablemente, entonces debemos tomar en cuenta que nuestra ingesta de alimentos y calorías pueda requerir ser menos para mantener un peso estable.

 

6. Haz una pausa para comer: ingiere tus alimentos con atención plena y dedicándole el tiempo que merece. Evita comer frente a la computadora o atendiendo algún asunto importante, mastica bien tus alimentos y disfrútalos, esto te ayudará a tener la sensación de plenitud o saciedad de una forma agradable y reconfortante.

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Bono: Realiza pausas activas. Esta no es una recomendación de tus comidas, pero sin duda influye en tu bienestar y equilibrio energético. Procura no pasar más de 2 horas sin moverte, es más, trata de hacer pausas activas cada 30 o 60 minutos. Estira tus brazos, piernas y rodillas, levántate y eleva los brazos, relaja tu cuello y camina cada que puedas, ya sea para ir al baño o mientras contestas una llamada. Esto no solo ayudará a quemar más calorías sino a mejorar tu circulación y oxigenación, te sentirás más animada y evitarás dolores por malas posturas. Tampoco olvides realizar actividad física regular (al menos tres veces por semana) para sentirte mejor.

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