Mié, 12/02/2015 - 20:05
- Mente y Cuerpo
Hay una nueva tendencia que está ganando terreno en la salud: comer cada dos horas.
Los expertos en nutrición siempre habían recomendado comer al menos cinco comidas al día para mantener un peso equilibrado, pero estudios del Imperial College de Londres sugieren comer cada dos horas. El dividir las comidas de 7 a 9 partes a lo largo del día acelera el metabolismo y combate la obesidad con mayor efectividad, pues hace que el metabolismo esté más activo y queme más calorías.
Imperial College de Londres comparó dietas que mantenían 2,000 personas residentes en Reino Unido, Estados Unidos, China y Japón. La investigación llevó dos grupos de participantes, uno que comía menos de seis veces al día y el otro que lo hacía más de seis veces.
Los resultados mostraban que el grupo que hacía menos de seis ingestas tenía una presión arterial sistólica significativamente mayor que el otro grupo. También se compararon los niveles de insulina, glucosa y ácidos grasos.
Las conclusiones del estudio indicaron que realizando ingestas frecuentes y en pequeñas cantidades, los niveles de ácidos grasos en la sangre se mantenían estables, lo que permitía al organismo asimilar cada ingesta de forma más efectiva. De esta forma se reduciría el riesgo de acumular grasas en las arterias, tener altos niveles de colesterol e hipertensión arterial.
‘Snacks’ saludables
- Frutas deshidratadas: conservan propiedades como nutrientes, aroma y sabor. Son prácticas para quienes están mucho tiempo fuera de casa, dado que se ofrecen en porciones que incluyen manzanas, peras o piñas, entre otras variedades. Se pueden comer solas, mezclar con cereales o incorporar en yogures.
- Barras de cereal: contienen cereales como trigo, avena, maíz, salvado y centeno, y muchas veces incorporan frutas secas y deshidratadas. Fundamentalmente aportan energía por su alto contenido de hidratos de carbono complejos (almidón y fibras) que a diferencia de los simples (glucosa y fructosa), se digieren más lentamente y generan un efecto más duradero.
- Galletas de arroz: son una gran fuente de energía saludable. Pueden reemplazar las galletas convencionales, aportando minerales como calcio, hierro y fósforo, además vitamina B. Se digieren fácilmente, son bajas en sodio y no contienen demasiadas calorías.
- Yogur, gelatina y licuados de frutas: todas estas opciones encantan porque las puedes mezclar con frutas.
¿Cómo deben ser mis comidas?
Tus “snacks” jamás sustituirán tus comidas (desayuno, almuerzo, merienda y cena). Solo serán pequeños alimentos que te darán energía para que continúes con tu día. Te daremos una idea de cómo deben ser tus comidas de ahora en adelante si decides llevar esta nueva tendencia en alimentación.
- Desayuno: comienza el día con frutas, proteínas y vegetales. Lo ideal es que sea sano, ligero pero también nutritivo. Juega con combinaciones de huevo, yogur, verdura, cereal, queso y fruta fresca. Ejemplo: omelet de vegetales y queso con pan integral, y fruta.
- Almuerzo: puedes tomar una sopa o crema ligera, ensalada con un aderezo (de ser posible de aceite de oliva), un sándwich en pan multicereal con carne magra. Acompaña tu almuerzo de jugo natural.
- Cena: deja la proteína para la noche y prepárate una pechuga de pollo asada o tu pescado favorito y acompáñalos con verduras y arroz integral.
Esto que te presentamos son tan solo algunas ideas, vuélvete creativa en la cocina. Pero recuerda aplicar la regla de las dos horas. La idea esmantener trabajando y tenerlo bajo control. No te irás con los días te irás acostumbrando a esta nueva alimentación.