Guía rápida para elegir la base ideal, según tu tono y tipo de piel

La base es el producto encargado de unificar el tono de nuestra piel, pero esta se convierte en un dolor de cabeza cuando hablamos de escoger el tono correcto.

Algunos de los errores que usualmente cometemos es probarla en el rosto, el brazo, la mano o lo dejamos como quien dice “al ojo”, y cuando vamos a ver hemos escogido la base incorrecta haciendo ver nuestro rostro disparejo al tono natural del resto de nuestro cuerpo. Es por esto que aquí te daré una guía rápida para que puedas escoger tu base ideal.

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Lo primero que debes saber es que existen diferentes tipos de piel: normal, seca, grasa, mixta, sensible o piel madura. Es indispensable que conozcas tu tipo, ya que esto te ayudará con la durabilidad de la base.

• Normal: Esta es una piel unificada y saludable, fácil de manejar. Puedes utilizar cualquier tipo de base dependiendo del acabado que quieras obtener, ya sea una piel matte sin brillo o una luminosa.
• Seca: Utiliza bases que en sus etiquetas digan hidratantes, luminosas o satinadas, ya que estas le aportaran un acabado hidratado y un aspecto más saludable a la piel.
• Mixta o grasas: Para este tipo de piel es recomendable utilizar bases libres de aceites, es decir con acabado matte o semi matte y de altas coberturas; esto ayudará a cubrir las imperfecciones (espinillas) además de controlar el brillo, características propias de este tipo de piel.
• Sensibles: Es indispensable que conozcas las necesidades de tu piel, debido a que esta es una piel delicada y un tanto difícil de tratar. Es recomendable utilizar bases específicas para pieles sensibles o hipoalergénicas.
• Maduras: Utiliza bases cuya fórmula sea ligera e hidratante, esto ayudará a disimular la apariencia de las arrugas, brindándole un aspecto más saludable.

Ahora el color…

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Una vez conozcas tu tipo de piel es momento de escoger el color de tu base, para esto debes identificar tu tono de piel ya sea claro, medio u oscuro. Pero, aún más importante es que debes saber tu sub tono, que puede estar entre los cálidos (tonos más amarillos, dorados o naranja), los fríos (que se caracteriza por tonos rosados o rojos) y neutros que, como su nombre lo indica, se encuentra en la mitad, ni tan rosado ni tan amarillo.

Una de las formas más fáciles de identificar el sub tono de tu piel es observando la parte interna de tus muñecas donde se encuentran visibles las venas: si estas son de color verde u oliva, tu subtono es cálido; si, por el contrario, tus venas son azuladas o moradas, tu subtono de piel es frío; o si puedes identificar todos estos colores en tus venas entonces tu subtono es neutro.

Si esto no te funciona también puedes optar por la prueba de los metales: si usualmente utilizas prendas de color oro, esto te indica que tu sub tono es cálido; si por otra parte eres de las que les va mejor la plata, tu subtono será frío; pero si eres de las afortunadas que les va bien ambos metales, entonces tu subtono es neutro.

Debes recordar al momento de comprar la base guiarte por los nombres que hay en ellas, por ejemplo, si en sus tonos dice Warm, Golden, Gold o la letra W esto quiere decir que es cálida; por otra parte si dice las palabras  Cool, rosé, beige o la letra C el subtono es frío, para el  subtono neutral debe decir la palabra neutral o la letra N;  si tienes la oportunidad de probarla debes colocarla en tu mandíbula justo donde conecta tu cuello con tu rostro, evita probártelas en otras partes como el rostro o las muñecas pues este no es el mismo tono de tu cuello.

Otra opción son las aplicaciones de internet cono Findation que te ayuda a elegir la base en el tono adecuado; sin embargo, para utilizarla es recomendable por lo menos estar segura de tu tono en 3 bases distintas y esta información es utilizada por la aplicación como referencia para poder arrojarte resultados en diferentes marcas y tonos

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