Vie, 02/08/2019 - 17:44
- Maquillaje + Piel
Mantener la piel limpia y radiante, así como prevenir el envejecimiento prematuro, son algunos de los beneficios de la limpieza diaria del rostro. Te contamos cómo hacerla, de acuerdo a tu tez.
Aunque siempre es fundamental tener un ritual de belleza diario, durante el verano hay que poner mayor cuidado, ya que la piel puede ser más factible a daños, debido a la mayor exposición a los rayos ultravioletas.
Una rutina diaria de limpieza y cuidado de la piel es importante para prevenir el envejecimiento prematuro o retrasar la aparición de arrugas. También te ayudará a que la tez luzca renovada y radiante, ya que permite la oxigenación de la piel. Sin obviar que el cutis se verá más suave y terso, sin acné o puntos negros.
Más allá de la apariencia de la piel, mantener una rutina de cuidado además será útil para que los productos cosméticos destinados a mejorar el aspecto de la piel tengan mayor efectividad y que el maquillaje luzca mejor.
Un aspecto esencial que debes considerar al hacerte una limpieza facial, es cómo hacerla según tu tipo de piel, ya sea grasa, seca o mixta.
La piel seca, por ejemplo, no presenta muchas impurezas, suele ser tirante y tiende a la formación de escamas y arrugas; además, tiene poros poco perceptibles y tiende a deshidratarse. La piel grasa tiene poros grandes y abiertos, es gruesa, su superficie es húmeda e hidratada. Mientras que la pielcombinada o mixta se caracteriza por ser grasa en la zona “T” del rostro y tirante en los pómulos.1. Desmaquillar el cutis
La cosmetóloga Martina de Alveo señala que el ritual de belleza debe hacer diariamente, tanto en el día como en antes de ir a la cama. Se debe comenzar por desmaquillar el rostro. "Es muy importante no acostarte con maquillaje, ya que esto daña la piel y provoca envejecimiento", advierte.
- Para desmaquillar la piel grasa, es preferible usar aguas micelares, que limpia la piel y remueve los excesos de grasa, sin agredirla. Es recomendable complementar con un desmaquillante de ojos.
- "La piel seca se debe desmaquillar con una leche para ir hidratando. No con geles, porque se deshidrata", aconseja.
- Y la piel mixta puede limpiarse también con agua micelar.
La cosmetóloga expresa que existen toallitas desmaquillantes que se pueden utilizar para este fin, "pero siempre después debes usar un limpiador, jabon, gel, agua micelar, porque la toallita no elimina el exceso de impureza, solo el color de lo que tienes por fuera del maquillaje", destaca.
2. Lavar el rostro
Después de desmaquillar el cutis, hay que limpiarlo. De Alveo resalta que de día los poros de la piel se llenan de la suciedad povocada por la el ambiente y los contaminantes. Y en la noche la piel desprende células muertas, por lo cual es necesario lavarse el rostro al levantarse, para así eliminar impurezas. "Cuando dormimos hay intercambio de células, y son más las que mueren que las que nacen", apunta.
- Martina sugiere lavar la piel grasa con gel limpiador, "esa es la presentación farmacéutica que se debe usar".
- Para la piel seca, es recomendable usar una leche limpiadora, que evitará que la tez se reseque. "Con la piel seca hay que tener cuidado, si no limpiarnos la cara correcatmente con leche limpiadora, puede provocar envejecimiento prematuro, se forman grietas en la piel y nos trae mucha resequedad", indica.
- La piel combinada puede limpiarse con mousse o gel limpiador.
Existen desmaquillantes que son limpiadoras a la vez. "Se llaman 3 en 1, que viene el limpiador, el tónico y el exfoliante. Esas limpiadoras pueden ser usadas como desmaquillantes". No obstante, la cosmetóloga insiste en que es recomendable usar siempre desmaquillante que elimina los excesos de sucio y grasa. "Los hay para los ojos, bifácicos (que te limpian los ojos y los labios), etc".
Destaca la importancia de desmaquillar y limpiar bien el área de los ojos porque sino "te va ocasionando oscurecimiento que se confunde con ojeras y produce envejecimiento prematuro, que el ojo se ve con líneas de expresión".
3. Hidratar la tez
Después que el rostro está limpio, es tiempo de nutrir la piel, para que luzca radiante y revitalizada.
En esta etapa lo primero es aplicar un tónico para mantener la piel firme y equilibrada. "El tónico lo recomiendo libre de alcoholes, para cualquier tipo de piel, para no alterar su pH", dice Martina.
Luego, es la hora del hidratante, que varia según la necesidad de la piel.
- "Ahora está de moda para pieles maduras las hidratantes a base de células madres, colágeno y factor de crecimiento (EGF), que protege el cutis contra radicales libres y agresiones medioambientales".
- Para pieles jóvenes hay hidratantes a base de frutas e ingredientes naturales que se pueden utilizar diariamente.
En las pieles secas se recomienda aplicar un hidratante tipo crema, especialmente con oclusivos, que humecte profundamente; sobre las pieles grasas, van bien los de texturas más ligeras y fluidas, que no dejen la piel recargada y no aporten más lípidos; y en las pieles mixtas, se puede aplicar hidratantes con activos humectantes y emolientes para tener una piel suave e hidratada.
4. Protector solar
El protector solar es el secreto de belleza más importante, según De Alveo. "El uso del protector solar es muy importante, sobre todo, en nuestro clima cambiante, donde hay mucha humedad y a veces tenemos mucho sol. El protector solar se debe usar como la pasta de dientes…todos los días", expresa.
Aconseja aplicarlo antes del maquillaje y reaplicarlo cada 4 o 6 horas, si no se está expuesto constantemente al sol; y cada dos horas, si la exposición es constante.
"No hay excusa para no usar protectores solares, porque los hay para todo tipo de piel, incluso para las grasas (oil control). También los hay con colores, sin color, en forma de emulsión, crema, compactos..." Sugiere comprar las versiones farmaceúticas.
5. Una vez a la semana
Otro paso que debes seguir en tu rutina, es la exfoliación, una vez por semana. Se puede hacer con gránulos naturales, como el azúcar, u otros cosméticos, siempre con cuidado de no maltratar la piel.
Ese momento es ideal para aplicar una mascarilla, que nutre la piel profundamente. Las hay en varias presentaciones (en crema, barros y arcillas, peel- off, velos, efervescentes, en polvo hasta el efecto sauna) y para diversas necesidades: exfoliantes, calmantes, astringentes, antiarrugas, efecto lifting, etc. También puedes optar por hacerlas naturales, con productos que tengas en casa, como miel, yogurt, aloe vera, avena, entre otros.
Además, es fundamental visitar al cosmetólogo, una vez al mes, para hacerse una limpieza profunda, que complementa el ritual de belleza.
Luego de la rutina, tu rostro estará listo para un lindo maquillaje.