En la mesa no solo se come

Cuando se habla de belleza, todo el mundo o quizá la mayoría de las personas piensan en el físico; sin embargo, es necesario comprender que esto va más allá, involucra: buenos modales y educación.

Y es que existen ciertos errores que muchas personas, en todo el mundo, cometen que no las hace lucir nada bonitas, al contrario. En este caso a la hora de comer, de comportarse en la mesa.

La experta en etiqueta y protocolo Cindy Pereira dijo que en los ocho años que lleva dictando cursos sobre Etiqueta en la Mesa y otras asesorías se ha percatado de que los panameños se están preocupando más por aprender las reglas de etiqueta en la mesa. “Antes no se le daba mucha importancia, pero desde que empezaron a llegar los extranjeros, con los cuales hay que competir a diario, hemos visto que las personas saben comportarse con educación y proyectan una buena imagen”, explicó.

Pereira mencionó que aunque los panameños sí cumplen con las reglas de etiqueta en la mesa, desconocen ciertas reglas como las más comunes: que los codos no se colocan en la mesa mientras se esta comiendo y nunca se debe abrazar el plato.

La entrevistada agregó que una de las principales fallas es que la mayoría de las personas, a la hora de comer en casa, evitan seguir las reglas; solo lo hacen en reuniones o restaurantes. “Lo ideal es aprender y con esa base practicar, practicar”.

Errores más comunes

Entre los errores más comunes de los panameños están:

• El manejo de los cubiertos y sobre todo como los sostienen; según Pereira, es terrible ver a un adulto empuñar un cubierto, es lo peor.
• Llenarse el plato como si la comida se fuera a acabar y hacen torres de alimentos que luego no se pueden comer. Llevar el plato sucio para servirse más comida, siempre se debe usar un plato limpio.
• Al tomar sopa se llevan la cuchara directo a la boca, error, el movimiento debe ser de adentro hacia afuera de esta manera si alguna gota va a caer cae en el plato.
• Dejar los cubiertos al borde de los platos en posición de remo... existen las posiciones de descanso y finalizar que no se cumplen.
• El manejo de la servilleta, y como la dejan, se debe de doblar no a la perfección, pero que no quede nunca sobre el plato y mucho menos hacer un bulto. No usarla como babero.
• Llamar al salonero a grito y peor aún chiflar, no se hace.