Día de las Escritoras, resaltando el papel de la mujer en la literatura

Mar, 10/16/2018 - 17:23
“Libres, rebeldes y transgresoras” es una iniciativa que surgió desde la Biblioteca Nacional de España, y que realizó en Panamá la Biblioteca Nacional, con el fin de destacar los aportes literarios hechos por féminas.

Con el fin de destacar el rol de las mujeres en la literatura, Panamá se unió a la celebración del Día de las Escritoras, el pasado 15 de octubre. Se trata de una conmemoración que nació en España en 2016, por iniciativa de la Biblioteca Nacional de España, la Asociación Clásicas y Modernas y la Federación Española de Mujeres Directivas, Ejecutivas, Profesionales y Empresarias, con el objetivo de visibilizar el aporte literario de las mujeres, quienes durante buena parte de la historia han estado en desventaja frente a los hombres en el mundo literario, al punto de tener que ponerse seudónimos masculinos por temor a ser identificadas o censuradas.

La iniciativa, que comenzó hace dos años en el país europeo, en la actualidad se ha extendido a Latinoamérica y como una celebración sincronizada. En el Istmo, la actividad denominada "Rebeldes, libres y transgresoras", la llevó a cabo la Biblioteca Nacional Ernesto J. Castillero con una lectura de textos de diversas escritoras y reflexiones de periodistas sobre dichas obras, que abarcaron desde poemas eróticos hasta crónicas de no ficción.

También contó con fotografías de la artista Lois Iglesias. "Lois tiene una colección de fotografías interesantes que retratan mujeres en distintas labores, desde profesionales del arte hasta campesinas. A través de su lente ha capturado a la mujer en acción en su entorno y nos gusta que sus imágenes no solo muestran como empoderadas a las profesionales de oficina, sino que muestran el valor de la mujer en su distintas facetas y ambientes", reconoció Dayana Rivas, relacionista pública de la biblioteca.

"El Día de las Escritoras es una iniciativa que surge en Europa, con la finalidad de destacar los aportes de las mujeres en la literatura universal. Voy a citar las palabras de Joana Bonet, de la Comisaría del Día de las Escritoras en España, desde donde recibimos la invitación: “Historiar la rebelión de las mujeres, rendir homenaje a sus protestas escritas, es un modo de recordar que la libertad actual, el lugar que hoy ocupamos en la sociedad, es el resultado de sucesivas rupturas. Por ello hemos querido dedicar el Día de las Escritoras de 2018 a la insumisión intelectual de aquellas autoras rebeldes y transgresoras que remaron a contracorriente, y en diferentes épocas y circunstancias cuestionaron el orden que les era impuesto desde la ficción, la poesía o el ensayo. Su aportación fue tremendamente valiosa: hallaron palabras nunca dichas y vertebraron una senda donde la libertad ondeaba y transcendía cualquier bandera”. Celebrando este día honramos la lucha de todas las mujeres que decidieron ir contra el sistema y tomar una pluma para crear literatura y aplaudimos a las que han asumido ese legado y siguen aportando literatura de valor", explicó Rivas.

Es el primer año que la Biblioteca Nacional Ernesto J. Castillero R. se unió a esta celebración. 

Libres, rebeldes y transgresoras

Como en la mayoría de las industrias, en la literaria a las mujeres les ha costado más que a los hombres llegar a lugares importantes y reconocidos. Por ejemplo, en la antiguedad, escribir era un derecho exclusivo de los hombres y Sor Juana Inés de la Cruz en su época se atrevió a desafiar ese paradigma. Además, solo trece féminas han sido merecedoras del premio Nobel de literarura, a pesar de los grandes aportes de muchas al mundo de las letras. 

Entonces, el lema de la conmemoración en 2018 "Rebeldes, libres y transgresoras", es justamente para celebrar a aquellas féminas que a través de su pluma se han atrevido a romper esquemas y han abierto espacios para las generaciones actuales y futuras. "Si leemos el texto completo que escribió Joana Bonet, quien también es periodista, encontramos claramente el vínculo de esas tres palabras (libres, rebeldes y transgresoras) con el mensaje de este día. Escribir no era un oficio que podían realizar con libertad las primeras literatas, incluso ya en épocas más actuales cuando la mujer tenía otras libertades, no era común que abordaran ciertos temas. Es por eso que hoy aplaudimos los poemas de una Stella Sierra por su osadía en atreverse a escribir de la mujer en los años 30, cuando aún no se escribía de esos temas. Lo mismo ocurre con el trabajo de Esther María Oses, por citar a algunas escritoras que marcaron una época en la que la literatura estaba totalmente dominada por hombres. Ellas fueron consideradas vanguardistas aquí en Panamá  y en la región", citó Rivas.

Precisamente, por la línea del lema, la celebración tuvo un toque feminista, con escritos dirigidos a empoderar a la mujer y mostrarla libre. La poeta Glenda Silva, quien leyó un peomario erótico, dijo que la poesía de este tipo es un medio para expresarse. "Mi primer libro era una poesía lírica que nos ayudaba a reflexionar, para mi segundo libro quise hacer algo erótico, que no se pasa la línea de lo vulgar. Me gustó hacerlo porque soy la voz de muchas mujeres que amaron o aman y no se atreven a decirlo", manifestó.

La poetiza señaló que las mujeres en este género han sido estigmatizadas y por eso muchas mujeres tienen recelo a opinar en temas sexuales.


Dayana Rivas consideró que a través de las letras se puede empoderar a la mujer. "Stella Sierra, Diana Morán y otras escritoras han planteado historias con matices que fortalecen el papel de la mujer dentro de la sociedad. No describen a la mujer como sujetos débiles o meramente sexuales, sino que destacan sus fortalezas, capacidades y logros. Cabe destacar que no solo las mujeres han empujado ese factor, la literatura sobre mujer escrita por hombres que resalta y valora las cualidades y aportes de las mujeres también ha aportado al empoderamiento femenino. Además, leer de mujeres que han sido revolucionarias, valientes y soñadoras impulsa ese empoderamiento del que hablamos. Recuerdo una novela de Alfredo Cantón llamada Nalu Nega, que describe a una joven que quería hacer algo distinto a lo que estaba estipulado para las mujeres, ella quería estudiar. Ese tipo de historias y muchas otras más que se han escrito ayudan a impulsar ese camino, esa es literatura que empodera a la mujer", manifestó.

La mujer en la literatura panameña

En Panamá existe muy buena producción literaria escrita por mujeres, desde sus inicios. "María Olimpia de Obaldía, Amelia Denis de Icaza, Hersilia Ramos de Argote, Diana Morán... y las actuales escritoras han aportado un gran valor al patrimonio bibliográfico de Panamá. Los trabajos de estas mujeres, cada uno con su estilo, agregó a la producción literaria del país descripciones que involucraban otra perspectiva. Algunas más románticas, otras más aguerridas y otras más atrevidas, todas dejando su sello en lo que escribieron y escriben. Muchas de las obras que estudiamos en las escuelas son de estas mujeres que he mencionado. Ellas han escrito del campo, de la mujer, de la patria, de nuestras luchas como país, de situaciones sociales. Unas fueron exiliadas por su posición y la forma en la que cuestionaron diversos hechos que han ocurrido en el país", recordó Rivas.

No obstante, en el país también ha habido desigualdad, pues a las mujeres les ha costado más encontrar un lugar. La escritora Danae Brugiati, quien en el evento habló sobre la obra y luchas de las primeras cuentistas panameñas, Gracielas Rojas Sucre y Morabia Ochoa López, afirmó que en la literatura panameña las féminas "hemos tenido grandes luchas y nos ha costado más". Se refirió a que la cuentista Rojas en su libro, que ella misma califica de 'Cuentos infantiles', "expuso situaciones a las que se exponían las mujeres, como la presencia patriarcal, que hasta las mujeres actuaban de acuerdo a patrones dictados por los hombres".

 

En relación a la escritora Morabia Ochoa, Brugiati mencionó que demostró una personalidad atrevida en sus poesías y cuentos. "En esa época, y siendo tan joven, fue transgresora y se atrevió. Son valores que hay que reconocer, es una lucha que iniciraon aquellas escritoras y que han seguido muchas otras en la literatura panameña", subrayó, agregando que el reto en la actualidad es que las féminas sigan luchando, "pero siempre con el respeto y nuestra calidad de mujeres".

Otra particpante de la actividad, la escritora Sonia Ehlers, indicó que otro gran reto de hacer literatura en el país es poder publicar la obra. "Hay muy pocas editoras, y si pasas por una editora, esta no te comercializa y al final estás escribiendo para tener los libros en tu casa. Si quieres escribir aquí, no te queda de otra que publicarte tú misma", afirmó, esclareciendo que aunque se ganen concursos, los libros demoran en salir. "Es un círculo vicioso. Es una falla no presionar más a las instituciones y al gobierno para que haya un instituto de cultura como debe ser", distinguió.

 

Ehlers comenzó a escribir luego de haberse jubilado, cuando tenía el tiempo y los ahorros para hacerlo. "He tenido que financiar casi todo lo que he escrito... Para ser escritor en Panamá hay que tener mucha pasión y vocación", reveló.

 

Una celebración

El evento “Libres, rebeldes y transgresoras. Panamá” contó con la participación de escritoras como Griselda López, Ela Urriola, Klenya Morales, Sonia Ehlers, Vannie Arrocha, Ana María Bueno, Dayra Miranda, Glenda Silva, Sydia Candanedo, Gisela Santamaría, Minerva Flores, Maribel Wang. También estuvieron presente las periodistas Esther Arjona, Karen Bernal y Ana María Pinilla, quienes alzaron su voz para celebrar el Día de las Escritoras. Durante la actividad, las escritoras aplaudieron el espacio y la oportunidad para celebrar el papel de la mujer en la literatura, así como el hecho de que cada vez hay más jóvenes en el ejercicio literario y más sitios para exponer sus trabajos.

Las palabras de bienvenida a este homenaje a las escritoras las dio la directora técnica de la Biblioteca Nacional Ernesto J. Castillero R., Guadalupe de Rivera, quien les recordó a las creadoras que sus obras ocupan un lugar especial en las colecciones de la Biblioteca Nacional de Panamá.
 
La profesora Griselda López fue la primera autora en tomar la palabra para relatarnos un cuento inspirado en una noticia que se desarrolló en una isla del Caribe. Luego le siguió la poeta Ehla Urriola con sus letras apasionadas. 
 
Sin duda alguna el cuento de Klenya Morales provocó muchas carcajadas, pero  también invitó a la reflexión sobre los roles otorgados al hombre y a la mujer en la sociedad. Con Sonia desafiamos las culturas impuestas y Vannie hizo un interesante planteamiento sobre el cuerpo perfecto.
 
Ana María Bueno contó su propia historia de dolor y de superación. Con las letras de Dayra coqueteamos con el erotismo de una forma muy sutil. Con Glenda otra vez nos apasionamos y con la señora Sydia vimos a los ojos la realidad.
 
Gisela, Maribel y Minerva cerraron el bloque de participaciones de las escritoras. Las noveles literatas estaban un poco intimidadas por lo narrado hasta el momento, mas en sus turnos no disminuyeron la calidad del repertorio.  
 
Luego las periodistas Esther Arjona, Karen Bernal y Ana María Pinilla comentaron sobre los textos de algunas de ellas y reflexionaron en cuanto a lo transmitido por la pluma femenina. 
 
Al final de las lecturas, todas las participantes pasaron un rato intercambiando experiencias y manifestando su admiración las unas por las otras. Fue una mañana llena de fortaleza y amistad.
“Libres, rebeldes y transgresoras” es una iniciativa que surgió desde la Biblioteca Nacional de España, entidad que invitó a otras instituciones amigas a unirse a la celebración que tiene como objetivo destacar los aportes literarios hechos por mujeres.

 

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