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Una habitación donde los muros, el techo y el piso sean de un color neutro o natural, es ideal para decorar con detalles de colores complementarios en pequeñas proporciones
Aprender a contrastar colores es importante para crear una decoración atractiva, con la que se logre un verdadero cambio cuando se pinte o decore un ambiente. Es posible usar contrastes entre blanco y negro, claro-oscuro, intenso-neutro, y entre colores complementarios, esta última es una de las maneras más atrevidas para combinar colores.
Los colores complementarios son aquellos que están ubicados en el extremo opuesto del círculo cromático, por lo tanto, se complementan. Asimismo, el complementario de un color primario siempre será un color secundario y a la inversa. En esta oportunidad se recomienda utilizar el amarillo, como un color luminoso, alegre y cálido; por otra parte, el violeta, oscuro, elegante y frío. Al unir las cualidades de ambos colores tan distintos, se puede crear un hermoso contraste.
Aplicar amarillo en los interiores genera un clima dinámico, de apariencia juvenil y relajada. Es la tonalidad perfecta para crear un espacio luminoso donde te diviertes y recibes visitas. Algunas variantes son el mostaza, amarillo limón, amarillo canario y amarillo pálido. Por su parte el morado, es una tonalidad muy seria y elegante. A la vez que crea en los espacios un clima de elegancia y serenidad, perfecto para un dormitorio principal o la sala. Algunas opciones son lavanda, ciruela, uva, berenjena, púrpura y violeta.
Sobre esta atractiva propuesta de colores impactantes Yariela Almanza, gerente de Color de PPG para Centroamérica menciona que “con la unión del color morado y amarillo en sus distintas variantes se genera un marcado contraste, pero es necesario que un color siempre se encuentre sometido por el otro, es decir que las cantidades no se apliquen en la misma proporción. Además es imprescindible la presencia de una tonalidad neutra, en especial el blanco, arena o beige, para equilibrar el conjunto”.
Una habitación donde los muros, el techo y el piso sean de un color neutro o natural, es ideal para decorar con detalles de colores complementarios en pequeñas proporciones. Ambos complementarios, como violeta y amarillo, podrían utilizarse perfectamente en ese ambiente. Los violetas son variados, así como los amarillos. En ocasiones los colores se utilizan solo en sus tonos suaves o pastel, disminuyendo el contraste notablemente y creando un ambiente mucho más apacible y delicado.
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