Muchas veces hemos conversado acerca de las dietas milagro, sus peligros y consecuencias en nuestro cuerpo, y también hemos discutido acerca de la retención de líquidos y el problema que resulta eso para bajar de peso... Pero esto que leerás quizás sea nueva información.
¿Me creerías si te digo que el chocolate, el vino y el queso son permitidos en un régimen para bajar de peso? Creo que no... pero quizás las explicaciones del profesor Tim Spector, profesor de epidemiología genética en King’s College London y autor del libro "The Diet Myth: The Real Science Behind What We Eat", te puedan ayudar a entender esto mejor.
Según Spector, hay algo grande que rara vez se tiene en cuenta al trazar nuestra visión de la alimentación para bajar de peso. Los microbios en nuestros intestinos tienen mucho más que ver con nuestros cuerpos. Spector sostiene que cada individuo tiene un conjunto completamente diferente de los microbios que " influencian los procesos en nuestro cuerpo, incluyendo nuestro peso", comentó al periódico The Independent.
En su libro, el profesor también concluye con que uno de los errores más comunes que hemos cometidos todos es creer que la nutrición es una cosa simple, algo de entrada y salida de energía en el cuerpo...y la verdad es que no es así. Hemos olvidado la función específica de ciertas cosas, como la de los microbios. Spector cree que la mayoría de las dietas fallan para promover la pérdida de peso porque el conteo de calorías y eliminar grupos de alimentos "hacen caso omiso del papel vital que los microbios del intestino desempeñan".
¿Cuál es la recomendación? Pues parece que aquí es donde entran el chocolate, el café, el vino y el queso. El chocolate, el vino y el café contiene polifenoles, antioxidantes que alimentan a los microbios y permitir que se reproduzcan, y el queso contiene "una amplia variedad de microbios incluyendo bacterias, levaduras y hongos, y cientos de especies además de miles de cepas conocidas y desconocidas."
¿Suena increíble, no? Pero de todas maneras debemos advertir que no podemos abusar de estos alimentos. La manera correcta de alimentarnos seguirá siendo alejarnos de los alimentos muy procesados, comer grasas buenas, bacterias saludables, granos enteros, y muchísimas frutas y vegetales.