- Nutrición
Al dormir, tu cuerpo no solo se recarga de energía, sino que también se almacena nueva información en tu cerebro, se liberan y regulan hormonas y se reparan las células.
Muchas veces subestimamos la importancia del buen descanso para la salud y el bienestar general debido a las diversas actividades y ocupaciones que podamos tener. Quizás hasta hemos llegado a escuchar que ¡dormir está sobrevalorado!, haciendo referencia a que para algunos puede ser hasta un mal empleo del tiempo; sin embargo, esto está lejos de ser real, pues el descanso tiene muchos beneficios para el bienestar integral, y no dormir suficiente puede conllevar afecciones a la salud e incluso alterar tu peso.
Al dormir, tu cuerpo no solo se recarga de energía, sino que también se almacena nueva información en tu cerebro, se liberan y regulan hormonas y se reparan las células, por lo que este proceso es importante para nuestra salud, en general. También lo es para nuestra salud nutricional. Dormir poco, contribuye al desarrollo de condiciones como obesidad, diabetes, hipertensión, entre otras cosas.
Las Guías de la Fundación Nacional del Sueño recomiendan para adultos entre 24 años a 64 años dormir de 7 a 9 horas diarias.
Un análisis de más de 20,000 datos de personas de Estados Unidos mostró que no dormir las horas adecuadas durante la noche puede interferir en las decisiones de alimentos que se ingieran. Además, se mostró un vínculo entre menos horas de sueño nocturno y mayor consumo de alimentos fuentes de carbohidratos, azúcares, cafeína y otros. Se encontró que las personas que no cumplían con sus horas de descanso adecuado tenían mayor probabilidad de consumir bocadillos con mayores calorías y menos valor nutricional, en comparación con los que sí estaban durmiendo el tiempo adecuado.
Por otro lado, los autores hacen referencia a otro aspecto que puede influir grandemente en la salud nutricional a causa de no dormir las horas adecuadas por la noche, y es el hábito de comer o “picar” mientras estás despierto por la noche, lo que acentúa el riesgo de desarrollar condiciones como obesidad, ya que se involucran varios factores: sedentarismo, consumo de alimentos de bajo valor nutricional y exceso del consumo calórico adecuado, además de la falta de descanso adecuado.
Para iniciar a cuidar más tu sueño te damos estos consejos:
- Crea una rutina de descanso. Realizar acciones que le reafirmen a tu cerebro que es hora de descansar, como apagar las luces, darte un baño, lavar tus dientes.
- Evita la luz azul de tus dispositivos electrónicos, mínimo 1 hora antes de tu hora de dormir.
- Evita beber demasiada agua antes de dormir, esto evitará que tu sueño se interrumpa constantemente.
- Come tu cena, mínimo 2 a 3 horas antes de tu hora de descanso y procura que sea ligera.
- Prioriza tu sueño. Sé prudente con la hora que debes parar de realizar otras actividades para prepararte para tu descanso.
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