- Nutrición
¡Mmmm...! Porque no hay nada más rico que untarle miel al pan tostado...
Indagamos en uno de los ricos manjares del que muy pocas veces se da a conocer, y que además genera ciertas dudas: ¡El de la miel de abejas!
Nutritiva y saludable, famosa por ser usada en los rituales de belleza de Cleopatra, la miel es uno de los elixires para la vida de saludable.
Sin embargo, ¿sabes cómo elegir una miel de calidad?, existen ciertos consejos al comprarla ya que no es lo mismo una miel comercial del súpermercado que una local.
Lo primero que tienes que saber es que hay dos tipos: la cruda y la que ha sido procesada. La miel cruda no se filtra, no conlleva ningún tipo de proceso con calor, es el mismo estado en que estaba cuando salió de la colmena.
Dulzura: La miel contiene fructosa y glucosa, eso hace que sea más dulce que el azúcar regular.
Cantidad de agua: Lee la etiqueta, la miel tiene menos del 20 % del agua, por eso los microorganismos no pueden crecer, esto le da una vida útil larga.
El agua es una de las reglas primordiales para medir la miel en lo que se refiere a calidad. Los expertos dicen que debe ser menor de 18% de agua, sin embargo algunos puristas dicen que 14% es el máximo, todo lo que sea superior a ese porcentaje es considerado de no buena calidad.
Miguel Quiros, apicultor en Rica Miel, aconseja un truco para comparar el contenido de agua en dos frascos distintos: primero cerciorate que tengan la misma temperatura y girarlos al revés. En el que suba las burbujas a la superficie más rápido, tiene un mayor contenido de agua.
La importancia del procesamiento: La mejor miel es aquella procesada mínimamente, lo que significa que solo se ha calentado "ligeramente", o no ha tenido calor, pues de esta manera mantiene todos sus minerales, antioxidantes, vitaminas, propiedades antimicrobianas, color y composición química. Esta es la miel cruda que venden los artesanos en mercados pequeños.
Lee la etiqueta: Cuando estés por comprar, lee la etiqueta, existen una gran cantidad de productos de miel con sabor que son, básicamente, jarabe de maíz, así como la miel adulterada. Estos por lo general pueden contener harina, almidón, dextrosa, conservantes , etc.
El polen: Las mejores mieles tienen polen y por eso se puede ver un poco turbia. Sin embargo no lo vas a notar tan fácil en su envase. Un truco es mirar en el frasco, en cuanto más clara la veas, más procesada será la miel.
El color: Puedes encontrarla en diferentes tonos, sin embargo todo depende de la flor que utilizó las abejas para hacer la miel. El color no es un signo de mala o buena calidad.
USAR MIEL PARA ENDULZAR
Si tienes la intención de utilizarla en tu café, té o jugo, debes saber que la miel como edulcorante tiene 64 calorías por cucharada, y el azúcar tiene 46 calorías por cucharada. Pero el azúcar es sacarosa, una combinación de fructosa y glucosa (dos moléculas unidas). Nuestro cuerpo necesita para utilizar sus propias enzimas para disolver y utilizarlo. El azúcar no contiene ninguna otra cosa, es sólo calorías vacías .
Los principales componentes de la miel son también fructosa y glucosa, pero no se combinan en sacarosa. Las abejas de miel agregan una enzima que los mantiene separados, por lo que nuestros cuerpos pueden absorber directamente. Adicionalmente, la miel también es más dulce que el azúcar, por lo que tendrá menos de la misma para el mismo nivel de dulzor .
ÚLTIMO CONSEJO
"Además de apoyar la economía local, la compra a los locales/artesanos o pequeños empresarios asegura que estás recibiendo la miel de una ubicación específica", dijo Claire Stewart, experta en apicultura, y agregó que "los grandes productores de miel acumulan miel de todo el mundo y esta se mezcla para lograr un sabor singular predecible; cada vez que comprar una determinada marca se obtiene el mismo sabor, pero no tienes idea su procedencia".