Emigdielys Samaniego, la modelo istmeña que superó el 'bullying'

Mar, 04/07/2020 - 14:41
La que fue Señorita 28 de Noviembre 2018 en Chepo habló sobre cómo llegó a las grandes pasarelas como Nueva York y París, y cómo superó las burlas de sus compañeros por ser la "flaca y dientona" del salón.
Cuando era niña, cada vez que Emigdielys Samaniego se miraba al espejo veía a una modelo queriendo cumplir sus sueños de recorrer grandes pasarelas; sin embargo, a sus espaldas, había quienes hacían chistes y la molestaban por su altura, peso y dientes. Irónicamente, estos tres “defectos” han sido gran parte de su carta de presentación para llegar a donde está hoy: modelando para diseñadores internacionales.
 

“En el colegio viví muchos malos momentos. Cuando era muy pequeña me hicieron mucho ‘bullying’ porque era alta, flaca y tenía los dientes feos, fui una niña que sufrió mucho, pero cuando mi mamá me regaló el curso de modelaje (a los 13 años) me empoderé, me llené de fuerzas. Luego, me entrenaron  (en la agencia) física y mentalmente para estar preparada para cualquier situación”, expresó la panameña de 19 años quien lució diseños de Vivienne Westwood y Alexander Mcqueen durante la última Semana de la Moda en París este 2020.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

 
Samaniego, quien fue Señorita 28 de Noviembre 2018 en Chepo, está muy orgullosa de sus logros, además no dudó  en admitir que en su corazón siempre supo que estaría en reconocidos escenarios.
 
“Sí me veía caminando para las grandes pasarelas, no es que he andado muchas, pero las pocas me hacen sentir muy orgullosa. Solo llevo  meses en este mundo (internacional) enfrentándome a las grandes, a las más famosas y me siento orgullosa de lo que estoy haciendo, porque a pesar de que es poco, para mí es algo enorme, no puedo explicar el sentimiento”, resaltó.
 

Emigdielys reconoció que fuera de las pasarelas trabaja duro para aprender a profundidad el idioma inglés, ya que aún no tiene dominio total y lo considera necesario.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

 

 

Sus inicios

La vida le empezó a cambiar a Emigdielys cuando su mamá decidió regalarle un curso de modelaje. "Mi madre me regaló un curso de modelaje en una agencia pequeña, que ya no existe y que se llamaba Glam Models, de ahí pasé a Physical Modelos, cuando firmé contrato con ellos, en mi primer año, participé en el Fashion Week Panamá 2014. Cuando cumplí 17 años Marie Claire Fontaine me trajo a Nueva York con citas a otras agencias, la primera que visité fue Identity Models (con quien trabajo actualmente). No fue fácil, esperé seis años para esta oportunidad (de modelar internacionalmente)", comentó.
 
La chepana confesó que desde los 4 años estaba interesada en ser modelo porque le gustaba maquillarse, peinarse, caminar en tacones y demás, pero por motivos de lejanía y económicos no pudo iniciarse en el mundo de las pasarelas a más temprana edad.
 
"Desde los cuatro años supe que quería esto, también quería ser bailarina de ballet, quería ser las dos cosas, pero a mi mamá le costaba llevarme y pagarme uno de estos cursos. Por eso  motivos no pude hacer lo que quería desde pequeña. Cuando cumplí los 13, como ya estaba más grande, mi mamá decidió regalarme el curso, que para poder asistir tenía que levantarme a las 4:00 a.m., agarrar el bus de las 5:00 a.m. y poder llegar a tiempo al curso porque tenía que ir sola", dijo.
 

Leer más:  Así luce la segunda colección de maquillaje de Selena Quintanilla

Dejó la universidad para llegar a los grandes escenarios

Cuando Emigdielys pensó que su carrera internacional no iba a "despegar", ella se centró en iniciar una carrera universitaria, sin embargo hubo una llamada que le cambió la vida.
 
"Yo vine a Nueva York (la primera vez con citas), caminé mucho y no fue fácil. La segunda vez que vine, ya tenía lazos con mi agencia actual (Identity Models), pero tuve que esperar un año para empezar porque la visa de trabajo de Estados Unidos no me había salido de una vez, de hecho había desistido de ir a Nueva York, ya había empezado a estudiar Ingeniería Industrial en una universidad de la localidad y justo cuando estaba terminando un cuatrimestre me escriben que la visa estaba lista y por ende tenía que regresar a Estados Unidos, dejé la universidad para aprovechar la oportunidad", detalla.
 
No fue fácil, menciona, porque no sabía nada de inglés, "o sea nada, pero ya hablo un poco, puedo sostener una conversación, hablar con los clientes. Esto (de ser modelo) es difícil hay que caminar mucho, después de los 'castings' hay que esperar la decisión de los clientes. Considero que (para llegar a los grandes escenarios) debes tener un poco de suerte y demostrar tu talento ante los demás. He ido escalando, aprendiendo más inglés, caminando mucho, haciendo mi trabajo bien; creo que cuando eres feliz y disciplinada en lo que haces, vas escalando y haciendo las cosas bien".
 

Los aplausos de su familia son los más importantes

Para la istmeña no hay mejor reconocimiento que el que le ha dado su madre en su carrera como modelo. "Mi familia está muy feliz, mi madre, que es lo que más me importa en la vida, siempre me ha apoyado y está muy feliz de que estoy haciendo lo que me gusta, está muy contenta porque el regalo que ella me dio ya  está dando frutos, aunque me falta mucho por hacer. Mi madre piensa que puedo aprender más, que siempre debo ser disciplinada y que siga aprendiendo inglés".
 

Lo más impresionante de llevar una carrera internacional

"Es muy diferente cuando lo ves de otro punto de vista. Ahora que estoy aquí y lo estoy viviendo sé que es difícil y nada fácil llegar a una posición en específico. Cuando no lo vives lo ves magnífico, y piensas cosas como 'esa modelo viaja y tiene todo', pero la verdad es que cuando llegas a este punto hay  que soportar muchas cosas, pasar malos momentos, caminar y caminar, debes darte a conocer y eso es lo más difícil, porque hay mucha competencia y debes marcar territorio siendo original y 100% tú", señala, agregando que también le ha dejado muy sorprendida que nada de lo que pasa es como yo pensaba, "que las modelos pasaban hambre, que eran anoréxicas, ese estereotipo se ha roto, las mujeres son muy normales y llevan un estilo de vida saludable. Todo es diferente a como lo imaginaba cuando estaba en mi casa queriendo hacer todo lo que hago ahora", expresa.

La famosa foto con Bella Hadid

"He tenido la oportunidad de modelar con Bella Hadid dos veces. La primera vez no hablamos, pero la segunda en París, sí, porque ya me conocía, ella es super linda persona, le habla a todo el mundo que conoce. Hemos hablado cosas básicas, como por ejemplo de dónde soy o que le gustaba algo de mi 'outfit'. No somos amigas, solo hemos hablado cosas básicas. Ella es super 'nice'", confiesa.

Además de entrevistar a Emigdielys para la revista impresa de Mujer, conversamos con ella en nuestro programa matutino por Nex Canal 21:
 

 

  • Compartir: