Hisopos: amigos o enemigos de los oídos

Con el objetivo de eliminar la acumulación de cera dentro del oído, muchas personas, quizá te encuentres entre ellas, a diario se limpian los oídos insertando en ellos un hisopo o palillo con un algodón en la punta. Lo mueven y escarban en el fondo hasta que la punta sale completamente limpia. Sólo así se sienten satisfechos y completamente limpios. Pero, según los expertos, esta práctica de higiene puede ocasionar más daños que beneficios.

Los otorrinolaringólogos explican que la formación de cera es un proceso natural, los oídos la usan para protegerse. Por eso, tratar de eliminarla puede ser contraproducente.

Durante años las madres han enseñado a sus hijos que hay que limpizarse las orejas de manera regular, siempre utilizando un hisopo o cotonete. Pero la realidad es otra.

Los otorrinolaringólogos indican que bajo ningún punto de vista se debe utilizar hisopos para limpiar las orejas. Esto porque al lo que se hace es empujar la cera hacia adentro. Esto hace que, además de crear un tapón auditivo, con el tiempo la persona sea propensa a infecciones y enfermedades auditivas como otitis, laberintitis, entre otras. Además, la membrana timpática puede romperse si realizas un mal movimiento.

¿Para qué sirve la cera de los oídos? El oído es un órgano que tiene la particularidad de limpiarse a si mismo. Posee unas glándulas llamadas ceruminosas que producen el cerumen. Esta sustancia no sólo lubrica el conducto auditivo externo sino que también lo mantiene perfectamente limpio. Además, el oído cuenta con cilias, unos vellos muy particulares que al moverse hacia afuera van empujando todas las partículas extrañas que provienen del exterior.

La pediatra Jo Ann Rohyans, aconseja que nunca se inserte un hisopo o cualquier otro objeto en el canal del oído del bebé. Y es que, debido a lo delicado que son se podría perforar el tímpano del oído.

"Si estás preocupada por la acumulación de cera en el oído de tu bebé, es mejor comentárselo al doctor. Si hay tanta cerilla que el doctor no puede ver el tímpano, él o ella la removerá. De otra manera, la cera se saldrá por sí misma con el tiempo y es muy probable que al meter un hisopo, la empujes más al fondo", expresó la experta.

Rohyans recomienda limpiar la parte de afuera de las orejas del bebé con un hisopo humedecido con aceite o peróxido, o bien con una toallita de algodón humedecida con agua tibia.