Después de toda la odisea que representó tu boda, o la decisión de convivir y compartir un espacio, llegará algo que para muchos también es una etapa complicada: la personalización de ese espacio. Pero, relájate, si todo sale bien, la decoración de tu nuevo hogar les permitirá crear un lazo de pertenencia con el sitio seleccionado, así como fortalecer su relación de pareja.
Cuando se decora entre dos, el consejo más sabio se resume en una palabra: paciencia. Convivir con otra persona trae consigo un proceso de adaptación, nuevas costumbres y probablemente, un nuevo estilo. Lo principal es que ambos respeten sus gustos, y así encuentren un punto medio que refleje la personalidad de ambos en cada rincón.
En el pasado, el campo de la decoración era algo exclusivo de las mujeres. Pero, según la diseñadora de interiores, Rita García de Frochaux, hoy día los hombres están mucho más dispuestos a participar del proceso.
La posibilidad de recibir la ayuda de un especialista en decoración puede facilitarles la tarea de ponerse de acuerdo, ya que un experto puede interpretar las necesidades de cada uno para proponer soluciones decorativas que satisfagan a ambos.
La personalización del lugar vendrá acompañada del estilo que decidan utilizar. “Existen estilos que se prestan para encontrar puntos medios mucho más rápido; éstos son los de líneas limpias, rectas y sin exceso de ornamentación”, según la diseñadora. Por ejemplo, el Art Deco y el Arts & Crafts son estilos ideales para trabajar en conjunto.
Las posibilidades igualmente pueden ir cambiando de acuerdo a las dimensiones del espacio: si viven en un sitio reducido, lo recomendable es utilizar el blanco como fuente de luz para crear una sensación de amplitud; pueden agregar color en una pared estratégica. Otro consejo es utilizar espejos, ya que multiplican el espacio y la luz. Y en cuanto a los muebles, es mejor adquirir aquellos que tengan doble utilidad, como por ejemplo una mesa de comedor que también funcione como mesa de trabajo.
Si en cambio viven en un espacio amplio, tienen la ardua tarea de no permitir que el lugar luzca frío e impersonal. Los colores oscuros serán sus aliados para crear ambientes más íntimos. Los muebles deben ser grandes y robustos, o pueden destacar algunas piezas de mayor tamaño. Si alguno de los dos conserva muebles de alto valor monetario o sentimental, se recomienda qué discutan cómo integrarlo al nuevo hogar.
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